Durante las estaciones de otoño e invierno el clima en nuestro país es cambiante. La temperatura puede estar agradable en gran parte del día, pero más al final del mismo puede bajar drásticamente. Estas condiciones nos predisponen a contraer algún tipo de virus que afecten las vías respiratorias, pues no contamos con abrigo suficiente.
En épocas de bajas temperaturas proliferan los virus que causan infecciones respiratorias agudas (IRA). Entre los que se observan con mayor frecuencia están el de la influenza, los rhinoviurs, el pneumoviurs y a parte el adenovirus entre otros, de acuerdo a los señalado por la Dra. Shirley Acuña, especialista en infectología.
Es importante saber que “se transmiten en contacto directo”, como por las pequeñas gotitas de flush que son las gotas de saliva que salen de la boca, ya sea al hablar, toser o estornudar; también por vía aérea, es decir, por compartir un mismo ambiente cerrado y poco aireado con una persona huésped del virus.
Dentro de los espacios considerados de riesgo la especialista citó a colegios, cárceles y hospitales, donde un factor que predispone el contagio es el hacinamiento existente. Enmarcado en lo que se señaló antes, el paso del virus de un organismo a otro se vuelve bastante seguro al compartir el mate o el tereré, porque pasa a través de la saliva.
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Esto puede ocurrir “en el periodo de viremia, lapso en el que el virus ingresa al cuerpo y pasa al torrente sanguíneo. Todavía no hay síntomas, pero uno ya está con el virus adentro”, expuso.
Como primera medida para evitar el contagio se recomienda el uso de alcohol en gel; después, “cuando se va a toser o estornudar que la persona no se tape con la parte interior de la mano, sino con la parte interna del codo, porque puede pasarle el virus sin darse cuenta a otra persona al saludarla”.
De entre los microorganismos mencionados el que más complicaciones puede presentar es el de la influenza “que estamos viendo bastantes casos de pacientes que acuden a urgencias”. Acuña comentó que los niños pequeños, personas mayores, además personas con enfermedades crónicas necesariamente deben recibir la dosis contra dicho estos. Actualmente el Ministerio de Salud dispone de este inmunizante.
Acuña detalló que “hay enfermedades tipo influenza, por eso para tener el diagnóstico certero, se debe hacer un estudio hisopado o por serología, para confirmar el diagnóstico e iniciar el tratamiento o recetar antigripales”. En caso de detectarse el virus de influenza, se administra la droga denominada oseltamivir.
En el sentido de prevención “las personas que tuvieron contacto con el paciente infectado con influenza, deben realizar un tratamiento preventivo con media dosis por la misma cantidad de días que tomaría el paciente con el virus”, comentó
Sobre las complicaciones que puede presentar esta patología, indicó “una de las más importantes y temidas es la dificultad respiratoria porque el área que más afecta es la pulmonar”. En cuadros como estos se debe tener mucho más cuidado porque los pacientes pueden ir a internación, mientras que si ya presenta mala mecánica respiratoria, ingresaría a terapia intensiva para mayor cuidado.
Dichas condiciones en los cuadros se dan por falta de tratamiento, sin embargo “tratamos de no llegar a ese extremo”. Aquí se tienen en cuenta a personas con defensas bajas, o porque son pacientes oncológicos o porque reciben medicamentos del tipo inmunosupresores.
Muchos creen que el clima fresco o frío provoca una baja en las defensas del organismo, empero “el frío no hace que disminuyan las defensas. Lo que pasa es que con el frío aparecen estos virus y se complica, no que bajen las defensas”, aclaró la especialista.
Para elevar las mismas y reforzar el sistema inmunológico “se recomienda el consumo de vitamina C. La naturaleza es sabia, en la época que más se necesita es cuando más vitaminas que levantan la defensa hay”, con relación a las frutas cítricas. Agregó que de una simple gripe causada por el tipo de virus respiratorio sincitial (VRS) puede derivar en uno de estos cuadros ya citados, por el choque de temperatura entre ambientes.
Todos estamos vulnerables ante los virus, “pero en quienes se presentan casos más grave es en niños chicos y personas de 65 años para arriba; o con enfermedad oncológica e inmunosupresores o con inmunodeficiencia por otro tipo de patologías, que pueden tener cuadros graves”.
Entonces las recomendaciones para evitar su contagio es que ante cualquier síntoma, como rinorrea que es cuando chorrea la nariz; ojos llorosos, tos o estornudos frecuentes; uno se lave las manos con alcohol en gel o bien con jabón común. Además es muy importante estar “bien abrigados, bien protegidos y cuidarnos en los espacios pequeños y que los niños no acudan si están enfermos. Sí se debe acudir al médico”.