Un cielo libre de cables

El remozado barrio turístico San Jerónimo se complace en ser el primero en todo el país en eliminar de su paisaje el cablerío al aire libre. Esto forma parte del plan de reconversión urbanística para el emblemático rincón de Asunción.

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A medida que la capital del Paraguay fue transitando hacia la modernidad, tener una vista del cielo se ha vuelto por demás complicada, tanto por los edificios como por la compleja e interminable maraña de cables de diversos servicios que cuelgan de los postes.

Este desordenado cablerío se volvió parte del paisaje en el microcentro de la ciudad y en más de una ocasión fue objeto del malestar ciudadano, sobretodo en los días de tormenta, ya que con el roce con las ramas de los árboles provocaban y siguen provocando cortes de energía eléctrica, a veces con consecuencias más graves cuando estos quedaban sueltos sobre el pavimento. Ningún barrio asunceno se salva de este escenario, salvo uno recientemente dado a conocer.

Entre promesas y un ida de vuela de las autoridades para la solución del problema y la implementación del cableado subterráneo, finalmente se dio inicio a un proyecto de esta naturaleza en un sitio que hoy es en un emblema de la autogestión barrial y progreso comunitario, oculto entre el microcentro y el puerto de Asunción, pero lleno de color y vida: la Loma San Jerónimo.

En octubre de este año además del relanzamiento del sitio como punto turístico, la Loma se despidió oficialmente de los cables al aire libre y con ello se realza el atractivo de su paisaje, que mantiene sus edificaciones de antaño, su aire de barrio, aderezadas con propuestas artísticas y gastronómicas, todas ellas a cargo de sus habitantes.

Hoy al visitar la Loma es posible mirar al cielo durante un atardecer, sin la interrupción que suponía el cableado aéreo, aunque faltan detalles por ajustar para que la obra esté completa, como el retiro de algunos cables que quedaron sueltos y una mayor iluminación. La inauguración está prevista el próximo 20 de octubre.

Bajo tierra se conectan los servicios de energía eléctrica, televisión por cable y teléfono, según López la obra está concluida en un 98%. Como complemento a dicha obra también se han mejorado los empedrados, veredas con piedras traidas de Paraguarí y Villarrica, también cuentan con desagüe pluvial y cloacal, un hidrante en caso de incendios, de igual manera se mejoró en lo referente a la presión del agua potable.

En palabras del presidente del club San Jerónimo, Francisco López, más allá de los inconvenientes propios de una obra todavía en proceso, existe una percepción positiva en el vecindario sobre este avance, tanto para la seguridad de las instalaciones, como para la continuidad de los proyectos para potenciar el sitio como atractivo turístico, tras una pausa.

Con el renacer de la Loma con la realización de ferias artesanales y gastronómicas y a medida que transcurra el tiempo, así como la sostenibilidad del proyecto, de aquí a unos ocho meses más se estará evaluando las alternativas para que a estas opciones, también se sume lo referente al alojamiento en el lugar, adelantó López.

Actualmente los extranjeros que se acercan a San Jerónimo, son derivados a un hotel en los alrededores y se espera que esta tendencia crezca a medida que transcurran los próximos meses. La Loma San Jerónimo se vio beneficiada en el marco del proyecto de Reconversión Urbana y Metrobús, por su cercanía del centro histórico de Asunción,

A través de su perfil en Twitter, la Loma hizo un preestreno de su nueva fachada, orgullosa de ella e invitando a la ciudadanía a ser testigo de su colorido rostro, libre de cables, y disfrutar de sus opciones. Mientras que los internautas, agradecidos con la invitación, también esperan que a mediano plazo esto sea replicado a una mayor escala.

 

 

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