El barrio Jukyty amaneció con el agua entrando a las casas de varias familias. Asimismo, en el barrio Santa Ana también hay algunos primeros afectados. “Es una zona muy vulnerable y pobre. Es un tema social de años y no es la primera vez que sucede obviamente”, recordó. Agregó que esperan que con las obras de la Franja Costera llevadas a cabo por el Gobierno Nacional esta problemática sea resuelta definitivamente y las personas tengan viviendas dignas.
Los afectados serán reubicados en el Centro Municipal número 6. Según las estimaciones, para fines de febrero, el río llegaría a 4,50 metros aproximadamente, con lo que se tendría a unas 2.000 familias desplazadas.
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