Familiares y amigos lo agasajaron con afecto el domingo pasado en la casa de uno de sus hijos, en barrio Molino de Luque. El excombatiente relató que durante la guerra le tocó vivir múltiples experiencias, por ejemplo la falta de agua y provisiones, pero que supo sobrellevar con valentía y fortaleza para combatir contra el enemigo.
Don Mareco, oriundo de San Pedro del Ycuanmandyyú, a los 17 años se sumó al Ejército paraguayo para defender a la patria. Fue designado “piecero” en el Regimiento de Infantería “RI5”. El veterano tuvo destacada actuación en la batalla de “Mandyyupecua”, “Boca de Tigre” y La Tranca, al mando del Cap. Ranulfo Esteche Sisa, contó.
Una vez terminada la contienda, Mareco quedó a custodiar la frontera hasta el 1937. Luego retornó y se instaló en la zona de Luque, donde formó una familia con su esposa María Ana Aquino, con quien tuvo cinco hijos.
“Niño” Mareco enviudó hace 3 años. A partir de allí quedó al cuidado de sus hijos, quienes el domingo pasado prepararon un merecido banquete para reunir a los demás miembros de la familia para agasajar al “cumpleañero”.
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