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En visita a ABC TV, en el programa “Media mañana”, el secretario de Estado informó asimismo que hay más de 20.000 notificaciones de casos febriles, algunos de los cuales son por influenza, pero entre el 60% y 70% corresponden a enfermos de dengue.
El alto funcionario mencionó igualmente que hasta ahora hay 1.453 casos confirmados de dengue, cinco muertes diagnosticadas, y 13 fallecidos por otras causas.
Sobre el punto, añadió que estiman que este fin de semana las notificaciones llegarían a 30.000 y dejó entrever que la cantidad de casos febriles podría ser mucho mayor, debido a que mucha gente no acude a los consultorios médicos.
El ministro advirtió que la enfermedad no se trata con análisis de sangre ni otras cosas, sino con abundante hidratación. Instó a la ciudadanía a no recurrir a la automedicación y menos aún cuando se trata de niños y personas de la tercera edad.
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Alertó que la dolencia generalmente deriva en una elevada presión arterial y picos de diabetes, los cuales pueden llevar a un accidente cerebrovascular (ACV) e incluso la muerte.
Al explicar el proceso de incubación del virus, dijo que lleva en total siete días y que la fiebre aparece a partir del tercero. “Hay que estar muy atentos con las náuseas, los vómitos, que impiden la hidratación correcta, y al cansancio y dolor del cuerpo”, afirmó.
Aconsejó que la atención debe agudizarse a partir del cuarto día, porque desde allí puede convertirse en un "dengue más grave" que puede derivar en la muerte. Alertó igualmente que el paciente no debe perder tiempo y concurrir rápidamente a consulta médica.
Consultado sobre si estamos ante una epidemia real, Morínigo aclaró que para ser epidemia el mal debe afectar a todo el territorio nacional y de una manera uniforme y que lo que hasta ahora se tiene son brotes en determinadas zonas del país. En el departamento Central hubo brotes en Mariano Roque Alonso, Lambaré, San Lorenzo, Luque, Ñemby y Villeta.
El secretario de Estado destacó que están trabajando en la concienciación de la gente, de modo a evitar que se llegue a una epidemia.
Anunció que con la Secretaría de Emergencia Nacional (SEN) van a utilizar drones para sobrevolar las zonas afectadas y así visualizar los patios de viviendas, porque hay casas que tienen piletas cargadas con agua y que presumiblemente están infestadas de larvas del Aedes aegypti.
El ministro afirmó que la gente no debería tomar conciencia recién cuando le toca de cerca la muerte de algún familiar o de una persona cercana, sino que como ciudadanos responsables se debe provocar el cambio, no ensuciando, no tirando en los yuyales objetos como latas de cervezas, que terminan convirtiéndose en criaderos del mosquito vector. Dijo que también se puede exigir a los municipios que limpien los lugares públicos a tiempo.
Morínigo comentó, asimismo, que la SEN adquirió cinco camiones volquetes para recolectar la basura que las municipalidades no han recogido y para enseñar a la ciudadanía a manejar de forma correcta sus desechos. “No tenemos otra opción”, subrayó.