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“Todo el sistema ya está llegando a su máxima capacidad. En estas condiciones hay que pensar en una alternativa”, manifestó a la 780 AM Carlos Heisele, al confirmar el informe en el cual la propia estatal reconoce que el “sistema eléctrico no es confiable”.
El alto funcionario admitió que la institución se encuentra en crisis, debido a que hay un inminente colapso por la alta demanda y la falta de infraestructura para responder a ella.
“Lo he asumido (la crisis) desde el primer día en que estamos aquí. Fui consciente de que esta situación podría presentarse”, manifestó.
Comentó que, si una de las siete líneas que distribuyen la energía desde las hidroeléctricas llega a caer, la población podría sufrir cortes en grandes áreas por periodos de entre 15 y 17 horas.
“Estamos cuidando para que esto no caiga y vamos a tomar las medidas preventivas para evitar situaciones más duras”, manifestó.
Explicó que el país incluso corre riesgo de un caos general, ya que al caer una de las líneas se podría producir un “efecto dominó” y las demás igualmente pueden quedar fuera de servicio.
Heisele ratificó que la única medida con que cuenta la ANDE para evitar el colapso es realizar cortes por zonas en momentos de alto consumo.
Aprovechó la oportunidad para apelar a la solidaridad de la ciudadanía en lo que respecta a utilizar la energía con moderación.
“Tengamos un sentimiento de solidaridad en este caso, tratar de tener un uso eficiente. Hay que recordar que muchos hospitales y comercios dependen exclusivamente de eso”, solicitó.