El ayoreo Nicanor Picanerei, de la comunidad Garai, dijo que necesitan ayuda para reparar la camioneta comunitaria que se descompuso hace una semana y media.
Los ayoreos recurrieron a la medida de fuerza por la negligencia de la municipalidad de no reparar el vehículo comunitario que utilizan para movilizarse y para insistir en una declaración de emergencia distrital. Además, piden víveres porque debido a las intensas lluvias no pueden salir de sus zonas para buscar alimento.
Indicó que seguirán en el lugar hasta que acudan el gobernador de Boquerón, Edwin Pauls (ANR), y el intendente de Filadelfia, Holger Bergen (PPQ), para escuchar sus reclamos. Al ser consultado si es cierto que ayer fueron retenidos vehículos y obligados a pagar "peaje", dijo desconocer el hecho pero acotó que sí había escuchado también esta versión.
Por su parte, el intendente Bergen denunció que varios choferes fueron retenidos ayer y les pidieron G. 100.000, para continuar viaje, pero con la condición de que queden en el lugar hasta que se junten 10 camionetas para abrir solo una vez el camino. El gobernador y el intendente solicitaron el martes al fiscal Pablo René Zárate una intervención a fin de garantizar el libre tránsito de las personas en la zona de Tte. Montanía.
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Según una carta firmada por el líder de la comunidad Garai, Taobi Picanerei, la medida de fuerza es apoyada por ocho comunidades de la zona. El intendente Bergen afirmó que estas comunidades son asistidas por la Mesa Interinstitucional de Desarrollo Integral de Filadelfia (MIDIF), que integran tanto la municipalidad como la gobernación.
Manifestó que no existen argumentos para declarar una emergencia en la zona e indicó que más de 330 familias de estas comunidades son beneficiadas por el programa de Tekoporã y que mientras este grupo cierra la ruta no será atendido por la municipalidad.