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"No, ni pasó por mi mente", indicó Bogado al ser consultado si pensaba renunciar a su banca. El legislador se presentó esta mañana para la sesión ordinaria de la Cámara de Senadores, anunciando que no piensa dejar el cargo pese a la condena judicial en su contra.
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Insistió en que incluso la condena en su contra es solo una cuestión "mediática". "Fue el primer juicio televisado, pero nadie conoce la sentencia porque simplemente se dejan llevar por un medio que publica conforme a sus intereses, distorsionando lo que realmente ocurrió en el juicio; en el juicio realmente debí haber sido absuelto".
Tuvo incluso la osadía de decir: "Yo no cometí ningún hecho punible, no existió durante todo el proceso un elemento objetivo que pruebe que cometí un hecho punible", pese a la serie de pruebas documentales y testificales presentadas por la Fiscalía y que justamente valieron su condena por un Tribunal, que incluso no admitió el hecho más grave de estafa, pese a que también estaba suficientemente probado.
En su defensa, fue soltando mentira tras mentira, afirmando que su caso incluso ya debió ir al "oparei". "Yo lo que hice es ponerme siempre a disposición de la Justicia, yo nunca chicaneé. Es más, el juicio está extinto porque el plazo expiró. Según la Ley Camacho, un juicio no puede durar más de 4 años. El juicio tiene casi 6 años", argumentó.
Esa es una falacia, ya que, tras innumerables incidentes que se turnaban en presentar él, la "niñera de oro", Gabriela Quintana, y otros procesados, logró dilatar este proceso por años.
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No quiso ahondar en la crítica hacia la bancada colorada de Añetete, pero sí dijo que "me parece que las decisiones políticas las asumen de acuerdo a los momentos políticos y este es un momento político importante, en el cual hay un ánimo que tengo que capear".
El legislador ya tendría los votos en contra para ser expulsado del Congreso, dando cumplimiento al artículo 201 de la Constitución Nacional de Pérdida de Investidura.