En total, fueron G. 20 millones los que el comandante Sotelo y jefes de comisarías lograron colectar para saldar la deuda con el Centro de Rehabilitación del Impedido Físico (Cerenif), donde Richar lleva adelante su tratamiento.
Richar Pereira (padre) explicó a ABC Cardinal que el primer mes de tratamiento fue el más costoso, ya que trepó a los G. 40 millones, pero actualmente su hijo sigue un plan de rehabilitación ambulatorio que cuesta G. 7 millones y, aunque se redujo bastante, sigue siendo toda una lucha poder alcanzar ese monto.
“Es increíble, nosotros tendríamos que apoyarlo a él, pero él es quien nos está llevando a todos, con la fuerza, con el ánimo”, destacó.
La madrugada del 13 de agosto de este año, Richar recibió un disparo de arma de fuego en la espina dorsal por parte de agentes de la Comisaría 4° Metropolitana. La herida le causó una inmediata parálisis y desde esa fecha su familia debe ingeniárselas para obtener los fondos para su tratamiento.
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