Cuatro meses sin Abrahán

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Hoy se cumplen cuatro meses del secuestro del menonita Abrahán Fehr Banman (35). Su familia ha pagado el pedido de rescate a cambio de su liberación, que hasta el momento no se cumplido.

Días atrás, el padre del colono secuestrado había confirmado el pago rescate solicitado por los miembros del autodenominado Ejército del Pueblo Paraguayo (EPP) el pasado 18 días de agosto, a cambio de la liberación de su hijo. No precisaron si fueron los US$ 500.000 exigidos inicialmente.

Sin embargo, hasta el momento no se ha dado la anhelada liberación de Abrahán Fehr Banman (35), que ya lleva cuatro meses en cautiverio. En una conferencia de prensa, en el local comunitario de la colonia Manitoba del distrito sampedrano de Tacuatí, el señor Abrahán Fehr, padre del secuestrado, había leído el comunicado dirigido a los captores de su hijo. “Me dirijo a ustedes para solicitarles la liberación de mi hijo Abrahán, por quien en una segunda oportunidad ustedes han solicitado el pago por su liberación. No tenemos prueba de que siga vivo y aun así igual cumplimos con ustedes”, indicó.

El sábado 8 de agosto, Abrahán Fehr Banman, junto a sus dos pequeños hijos y otro peón, se encontraban trabajando dentro del predio de la familia Soljancic, ubicado en la Colonia Manitoba del distrito de Tacuatí, departamento de San Pedro, cuando fueron interceptados por cinco miembros del grupo criminal EPP.

Posteriormente, al llegar a una zona boscosa decidieron liberar a los menores y a uno de los peones. Abrahán y Silvano quedaron con los criminales. Casi 24 horas después, Silvano fue liberado, llevando con él una nota para la familia de Abrahán: debían entregar la suma de US$ 20.000 para que lo liberen. Los familiares y vecinos del colono consiguieron con mucha dificultad conseguir dicho dinero pero llegaron tarde para el pago solicitado.

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Luego, en una conferencia de prensa, los familiares confirmaron que los captores se pusieron en comunicación y solicitaban la suma de US$ 500.000, en un plazo en el que a la familia se le hacía casi imposible conseguir todo el dinero, debido a las deudas que habían asumido.

El EPP en los plagios que ha perpetrado a lo largo de su historia ha logrado que la familia Debernardi pague US$ 1.000.000, la familia Cubas US$ 300.000 dólares, la familia Lindstron US$ 130.000, la familia Zavala US$ 550.000 y la familia Fick Bremm US$ 500.000.