Madre de Cecilia exige “nombre y apellido”

Gusinky señaló que no les convenció la explicación brindada por Arnoldo Wiens para justificar el contenido del libro escrito por su esposa, Verónika Wiens.

El expastor y actual político colorado ofreció una conferencia de prensa para desmentir que el volumen mencione a los Cubas Gusinky; sin embargo, se negó a revelar la identidad de la familia referenciada.

“No nos sirve la explicación que dieron. No vamos a dejar ni siquiera que se sospeche que pudiéramos ser nosotros los protagonistas de esa historia. Tengo amigos, familia”, reafirmó, en conversación con ABC Color.

Respecto a la postura de la familia Wiens, que argumenta “secreto de confidencialidad” para no dar nombres, la madre de Cecilia Cubas adelantó que accionará, a menos que públicamente se dé a conocer las identidades.

“Tienen que salir y decir nombres y apellidos. No se puede decir lo que dijeron así irresponsablemente. Que vayan a contarles a su abuela esa historia (de la confidencialidad)”, refirió.

Consideró que hay contradicciones en el argumento de los Wiens y repudió nuevamente la postura de calificar como “justicia divina” el asesinato de la hija de un político.

Indicó que la autora del libro “La familia detrás de las cámaras” ahora tiene un compromiso no solo con su familia, sino con toda la ciudadanía que interpretó que se hacía referencia a Raúl Cubas.

“Estas personas escribieron eso irresponsablemente, que diga la señora a quién se refiere. Que diga quién es la informante. Ella debería hacer eso. Tiene un compromiso”, insistió.

En el libro que despertó polémica en la víspera se menciona que la familia de un político está involucrada en hechos como tráfico de órganos y violación.

“Con Arnoldo lloramos y entendimos que Dios es justo”, manifestó Verónika en su libro al señalar el asesinato de la hija del político.

Mirtha Gusinky desmintió igualmente que la reacción de la familia ante el libro constituya una “persecución política”.

“Esto no tiene nada que ver con la política ni persecución política. Ellos no son perseguidos. Tienen que decir nombres”, ratificó.