Alrededor de 40 bomberos de Asunción, Capiatá, Ñemby, Fernando de la Mora y San Lorenzo siguen desde hace dos horas luchando contra el fuego, tarea casi imposible puesto que no existe una fuente de agua cercana, denunció el capitán Rubén Valdez, de los Bomberos Voluntarios del Paraguay.
“Con el problema del agua es difícil sofocar el fuego, por ello pedimos nuevas autobombas, porque las que vinieron están agotadas. Varias empresas de la zona se ofrecieron para abastecernos, así no tenemos que ir tantos kilómetros en busca de agua”, expuso, según informes de Gabriela González Escalada, periodista de ABC Color.
El intenso calor provocó que el techo y parte del muro del depósito se desplomaran. Por fortuna, el sitio está rodeado de baldíos y un campo de fútbol, lo que hace que sea más complicado que se extienda a viviendas particulares.
