“Cuando comparamos lo que (Alfredo) Stroessner hizo, con Gobiernos de la región, el Paraguay era atrasadísimo. La estructura de corrupción que tenemos hoy, el prebendarismo, el clientelismo, la corrupción, son una herencia, lo que nos dejó este papá grande”, destacó la historiadora Ana Barreto esta mañana.
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Relató que durante esa época, se ocultaban los datos sobre violaciones y suicidios y por eso nunca llegaban esos datos a los medios de comunicación y se creaba el espejismo de que no existía criminalidad.
“Los motochorros, las franjas de pobreza, son resultado de esta práctica de corrupción, la exclusión que provocó la ocupación agrícola, las pocas posibilidades que tenían las comunidades campesinas, hospitales, escasas posibilidades laborales y de formación de los hijos, provocó que empiecen a formarse, desde finales de los años 70 y 80, los cinturones de personas excluidas”, aseguró en una entrevista en los estudios de ABC Cardinal.

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Asimismo, señaló que no existió un plan país a largo plazo, que sobrepase un solo Gobierno, y por ello se dio este desenlace natural de lo que el dictador instauró. “Y eso va a seguir en aumento hasta que no hayan caminos radicales y estructurales en la educación”, consideró.
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Por otra parte, comentó que en los informes de la Comisión de Verdad y Justicia figuran datos que son valiosos para nuestra historia, sobre los desaparecidos y hectáreas repartidas a los militares. Sin embargo, el Ministerio de Educación hasta ahora no ha incluido un mecanismo para que los docentes puedan hacer que estos datos lleguen a las escuela y la dictadura de Stroessner sea ampliamente estudiada.
