Mientras gran parte de la zona primaria de la Aduana de Puerto Falcón está siendo cubierta por las aguas -principalmente del desbordado río Pilcomayo y en menor medida del río Negro- en la frontera entre Falcón (Paraguay) y Clorinda (Argentina), los cerca de 2.500 pobladores de esta ciudad fronteriza paraguaya no tienen agua potable. Así lo confirmó a ABC Color la propia intendenta de Falcón, Delia Ramírez.
“Toda la ciudad de Falcón está sin agua desde hace tres días porque el motor y las cañerías del sistema quedaron averiados, rotos y bajo agua en la zona inundada. Estamos trabajando con dos cisternas: una del Ejército y otra de la Gobernación para traer agua que nos provee la Essap de Villa Hayes para poder dar agua potable a la gente”, explicó Ramírez. Dijo que la situación es realmente complicada y preocupante, sobre todo porque el nivel del río va aumentando. “Como mínimo se mantiene el nivel de las aguas, no hay un descenso, y eso es lo preocupante”, indicó Ramírez.
En Falcón, la provisión del agua potable está a cargo de la empresa privada Leduc SA, que, según los datos, tiene un contrato por varios años para ofrecer el servicio. Según la intendenta municipal, los responsables de la firma están ayudando también a intentar solucionar el problema, pero lo concreto es que todo depende de que las aguas bajen para poder arreglar el motor y las cañerías rotas, a fin de que se vuelva a tener la provisión del vital líquido.
Todos los beneficios, en un solo lugar Descubrí donde te conviene comprar hoy
Con respecto a los damnificados, Ramírez explicó que actualmente Falcón tiene como máximo 100 familias perjudicadas por el avance del nivel de los ríos, que ya están siendo atendidas. Sin embargo, la ciudad se está transformando principalmente en un lugar de albergue para los cientos de familias de zonas aledañas que están siendo afectadas de los ríos Pilcomayo y Negro, que rodean las zonas de Nanawa, Falcón y Chaco'í.
En ese sentido, la intendenta dijo que en zonas altas de la ciudad se están refugiando familias de los mencionados distritos que ya están bajo agua desde hace días. La ex Puerto Elsa (Nanawa) está totalmente inundada como consecuencia del desborde de ambos ríos y una parte importante de su población fue sacada de sus hogares. Un grupo de familias fue evacuada a zonas más altas y otro llevado a Clorinda, según los últimos registros de la Secretaría de Emergencia Nacional (SEN), que viene trabajando en este sector. Actualmente, toda la entrada a la zona portuaria de Falcón está con agua (ver adjunto vídeo de Rocío Portillo, corresponsal de ABC en la zona) y se teme que, de aumentar el nivel, el tránsito ya sea imposible.
Actualmente, según los datos de la intendenta Ramírez, en Falcón habilitaron 6 refugios y en mitad de ellos ya registraron a 300 familias. La jefa municipal cree que llegarán a registrar hoy a 600 familias refugiadas en Falcón, derivadas mayormente de la zona baja del Chaco. A la par de estos operativos, también se debe prever agua para los demás habitantes de la ciudad. Los trabajos para las autoridades de la zona recién comienzan.
Según lo que dijo la intendenta local, las aguas está empezando a ingresar a algunos barrios de las zonas bajas, como el de San Francisco, lo que representa una gran preocupación porque eso implicaría tener que evacuar a más familias. El ruego de los pobladores es que, por lo menos, ahora las lluvias paren.
A nivel nacional, según datos de la SEN, en todo el país suman casi 26.000 las familias que están en los albergues creados por la institución. Mientras tanto, se calcula que unas 100.000 familias ya fueron desplazadas en diferentes departamentos como consecuencias de la crecida de los ríos. A este fenómeno, hay que sumar lo que está pasando con las tormentas severas, que también afecta a cientos de familias. La Secretaría de Emergencia habilitó hasta ahora 109 refugios en todo el país.
Desde la Dirección Nacional de Aduanas (DNA) informaron que las operaciones aduaneras en Puerto Falcón se mantienen, al menos hasta ahora. El desborde de los cauces hídricos de la zona hizo que las aguas lleguen a gran parte de la zona primaria aduanera de este puerto fronterizo. Es más, el estacionamiento ya está prácticamente cubierto por agua. Sin embargo, la DNA y la Administración Nacional de Navegación y Puertos (ANNP), junto con la Dirección de Migraciones, se mantienen operativas a través de casetas móviles que están ubicadas en lugares más altos en donde se realizan los papeleos.
Celso Ocampos, administrador aduanero de Falcón, confirmó que camiones de carga o con contenedores ya no pueden pasar por este local aduanero y son derivados a la Aduana de Chaco’i, por donde pueden ingresar o salir del país. En Falcón se les toma los datos para que las mercaderías puedan ser liberadas en Chaco’i.
Los ómnibus de pasajeros todavía pueden pasar la frontera por esta Aduana y hacer las documentaciones pertinentes. La Aduana argentina en Clorinda se mantiene operativa, por lo que también del lado paraguayo las diligencias documentales y el paso de ómnibus de pasajeros y de particulares se mantienen. No obstante, si llega a aumentar un poco más el nivel del río -que en la zona actualmente tiene cerca de los 7,7 metros- la situación podría forzar a que la frontera se cierre.
Pero la de Falcón no es la única Aduana que siente los efectos de este inusitado crecimiento del nivel de los cauces hídricos. Algunos puestos están totalmente fuera de servicio, como el de Itá Enramada, mientras que otros como el de Fénix y Caacupemí están buscando alternativas para seguir trabajando.