Olga volverá a Paraguay

La Secretaría de Repatriados pondrá a disposición de Olga Velázquez viuda de Serra el pasaje para que retorne a Paraguay. Ella vive en Nueva York y su caso salió a luz tras una publicación de un medio local.

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Olga tiene 70 años y vive hace más de 25 años en Nueva York, Estados Unidos. Su caso salió a luz luego de que un medio local, El Diario, contara en varias líneas el padecimiento de la compatriota, que pasaba las noches en las calles.

ABC Color se hizo eco de su historia y la colectividad paraguaya se movilizó para ubicarla. No podían aceptar que una compatriota pasara hambre y frío en las calles de Nueva York.

La campaña de búsqueda también incluyó al Consultado de Paraguay en Nueva York, cuyos funcionarios se pusieron en campaña para dar con el paradero de Olga. Tras unos días, por fin dieron con ella.

En la sede diplomática contaron a Olga que la estaban buscando porque supieron de su historia y de su padecimiento, además del motivo por el cual en los 90’ ella dejó Paraguay para viajar a los Estados Unidos: trabajar para ayudar económicamente a sus hijos.

Fue ahí que Olga quiso avisar a sus parientes que estaba bien, y que las cosas no eran tan malas como pintó el medio de comunicación local.

“Yo nunca viví en las calles”, precisó Olga, en conversación con ABC Color, tratando de dar más claridad a lo que se sabía de ella. Relató que mantenía una vida bastante movida, pues debía buscar albergues en constantes periodos. “Acá te ponen desayuno, almuerzo. Comida no falta”, puntualizó. Dijo que tiene amigas con las que está siempre, sus compañeras del día a día.

Aprovechó la oportunidad para desmentir que tenía problemas con sus familiares en Paraguay. Recordó a su mamá, a su papá, a su hijo y hasta la casa que tiene en Limpio. “Pero me fui acostumbrando a este lugar”, dijo.

Olga contó que había viajado a Estados Unidos porque le dijeron que tendría muchas oportunidades laborales. Trabajó en varios oficios hasta los últimos años, como peluquera, por ejemplo, pero luego terminó desempeñándose como empleada doméstica. “Actualmente no trabajo”, precisó, cuando se le preguntó a qué se dedicaba. Reiteró en ese momento que afortunadamente comida no le faltaba por el sistema de asistencia que existe en el país del norte.

En un momento de la conversación dijo que quería volver a Paraguay, que extrañaba a su familia, y que era consciente de que mientras más pasa el tiempo, más difíciles serán las cosas para ella en el extranjero.

También habló con nosotros el cónsul paraguayo en Nueva York, Juan Alfredo Buffa, quien contó que muchos llamaron a la sede diplomática para preguntar por Olga. Adelantó que actualizarán sus documentos, que ya estaban vencidos.

Dijo que le brindarán asistencia y que hasta pondrán a disposición de ella parte del fondo social de la institución, en caso que lo requiera. “Ella está en una situación de inseguridad por el ambiente en que se desenvuelve, por su edad”, indicó el diplomático. Insistió que tratarán de asesorarla lo mejor posible y de darle “una mano” cuando necesite.

Así terminó la conversación, tras una despedida con Olga detrás del teléfono.

Minutos después de haberse cortado la llamada, el teléfono sonó nuevamente. Era el cónsul.

“Hablé con el ministro de Repatriados y me prometió sacar una orden de pasaje para que la señora Olga vuelva a Paraguay. Será en unos días más. La señora quiere volver a Paraguay”, anunció. “Ella nos pidió solo unos días para juntar sus cosas y así volver a Paraguay”.

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