Opaci nunca fue auditada pese a recibir millones

Pese a recibir millones de fondos públicos a través de unos 200 municipios, la Organización Paraguaya de Cooperación Intermunicipal (Opaci) se manejó con total discrecionalidad en todos estos años.

En los últimos días se puso de relieve que en realidad esta institución es una entidad privada, que, sin embargo, tiene injerencia directa en las recaudaciones de casi todos los municipios del país. La situación cobró notoriedad luego de que la Opaci decidiera extender su esquema de recaudación, lo que despertó molestia de algunos intendentes, entre ellos el de Tobatí, Dan González, quien denunció que la organización pretende obligar a las comunas a esquilmar a los contribuyentes para aumentar sus ingresos.

Diego Marcet, director jurídico de la Contraloría General de la República, confirmó a ABC Cardinal que en todo este tiempo la ONG se manejó a sus anchas sin tener que soportar el control de algún organismo estatal. Aclaró que aunque se trata de un ente privado, es totalmente auditable, ya que recibe fondos públicos. “La Contraloría tiene atribuciones para verificar la gestión fiscal o de entidades privadas que administren fondos públicos; si la Opaci administra fondos públicos, a través de los municipios, puede ser verificable en lo que hace a estos fondos”, explicó.

Según indicó, la Opaci pudo evitar los controles durante todos estos años debido a que “normalmente se auditan asociaciones que perciben fonndos del Presupuesto General de Gastos de la Nación. En este caso difiere un poco, porque se trata de fondos municipales; en lo que hace a los fondos que ellos reciben puede ser verificada la gestión patrimonial en sí”, indicó.

El titular de la Opaci, Ricardo Núñez, prometió abrir la institución a la Contraloría, luego de que durante toda esta semana se cuestionara los millones que recibe esta instancia privada sin rendir cuenta alguna. “Enviaremos una nota a la Contraloría para pedir una auditoría”, aseguró al tiempo de tratar de asegurar “transparencia” en la organización.

Reconoció que su decisión de permitir una revisión del órgano extrapoder obedece a las constantes denuncias y publicaciones periodísticas. “Resulta que como se publica permanentemente que es una ONG y un poco para desvirtuar un poco toda esa campaña de desinformación”, argumentó. Núñez reconoció, sin embargo, que la Organización Paraguaya de Cooperación Intermunicipal efectivamente es una organización no gubernamental y reiteró que solo el año pasado la misma recaudó unos G. 17.000 millones a través de los municipios. Justificó sin embargo este esquema de cobros al señalar que ofrecen “servicios” a las comunas.

Los últimos informes indicaron que la Opaci prácticamente se lleva el 75% de lo que los municipios recaudan por el pago de registros de conducir. La institución privada se embolsa G. 20.000 de los G. 27.000 que se cobra en promedio a cada contribuyente por la renovación de sus licencias. La organización igualmente recauda con los trámites de habilitación de vehículos, además retener los impuestos municipales por las operaciones de venta de bienes raíces y créditos (hipotecas).