Quería asentarse en Paraguay

El ginecólogo brasileño Roger Abdelmassih (70), condenado a 278 años de cárcel en Brasil por el abuso sexual de 39 pacientes, estaba oculto en Paraguay desde hace tres meses y “era cuestión de tiempo” para que intente abrir alguna clínica en el país.

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Así lo señaló Luis Rojas, titular de la Secretaría Nacional Antidrogas (Senad), institución que trabajó en conjunto con Migraciones para detener al extranjero, uno de los criminales más buscados en Brasil y en el mundo.

Roger Abdelmassih (70) estaba oculto en una lujosa vivienda del barrio San Cristóbal, de Asunción. El funcionario reconoció que no tenían información de esta persona, hasta que finalmente la Policía Federal pidió apoyo de las autoridades paraguayas para ubicar al fugitivo. Luego de un trabajo de inteligencia de dos semanas, finalmente, los agentes pudieron detener al médico brasileño. “Previmos todos los escenarios; se hablaba de que iba a intentar suicidarse, de que se iba resistir a la detención”, detalló.

Una vez aprehendido, el multiviolador fue trasladado al Grupo Aerotáctico de la Fuerza Aérea, desde donde luego fue llevado hasta Ciudad del Este, donde lo condujeron por el Puente de la Amistad para entregarlo a la Policía brasileña.

Rojas mencionó que el extranjero estaba en el país desde hace al menos tres meses. “Estaba iniciando sus contactos”, refirió, en contacto con Canal 100. Sobre la posibilidad de que el brasileño haya intentado ejercer su profesión en Paraguay, el titular de la Senad indicó que “no pudimos detectar actividad profesional alguna, pero creo que era cuestión de tiempo”.

Rojas señaló el alto grado de peligrosidad de este criminal y el riesgo que representaría que planeara abrir alguna clínica en la capital. “Este objetivo es un depredador sexual, un depredador científico”, sostuvo. Abdelmassih “no tenía una vida normal, era una persona con inestabilidad emocional. Te imaginás la amenaza potencial de esta persona con trastornos; padre de familia aparentemente, pero por otro lado, un depredador científico”, manifestó.

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