“Los médicos confirman la muerte de 19 personas”, dijo un funcionario del departamento de bomberos a la AFP. La fuente indicó que otras 25 personas resultaron heridas, 20 de ellas de gravedad.
La policía refirió que el agresor, un hombre de unos 20 años, se entregó a las autoridades.
El ataque –una de las peores masacres en el Japón de posguerra– ocurrió en un centro de salud ubicado en una zona montañosa de Sagamihara, una ciudad de 700.000 habitantes ubicada a medio centenar de km al oeste de Tokio.
Según la agencia de prensa Kyodo el atacante sería un exempleado del centro de salud, de 26 años y llamado Satoshi Uematsu.
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La cadena de televisión estatal NHK agregó que el joven es un estudiante de docencia. El agresor habría dicho al entregarse “los minusválidos deberían desaparecer todos”.
El hombre, según reportes parciales, rompió una de las ventanas para ingresar al centro, donde son albergadas 160 personas.