A juzgar por la violencia verbal, los gestos exagerados y el tono de voz, Luis Canillas podría haber estado bajo los efectos del alcohol cuando se filmó el video en el que insulta a una figura corpórea de la senadora Desirée Masi (PDP). Ahora se sabe que él mismo lo difundió.
Lejos de guardar la discreción después de su noche de desbordes y exabruptos, Luis Fernando Canillas, redobló la apuesta y se encargó de difundir él mismo las pruebas que lo muestran fuera de control.
"¿Sabés lo que me pone nervioso? Que esta hija de puta no me deja en paz. Déjenme de joder, que se vaya a la puta, vieja de mierda. ¡Fuera, fuera!". Estas palabras se escucha gritar exaltado a Luis Fernando Canillas, asesor de la Entidad Binacional Yacyretá (EBY), funcionario oficialista del primer anillo del presidente Horacio Cartes.
La escena transcurre en un domicilio particular, en una reunión informal, donde está rodeado de sus hombres de confianza. Se sabe que estuvo presente Hirán Delgado Puentes, conocido con el alias "el padrillo republicano", quien también se deshizo en exabruptos e improperios hacia Masi y los políticos Efraín Alegre (PLRA), Rafael Filizzola (PDP) y Mario Abdo Benítez (ANR). Para la ocasión confeccionaron también figuras a escala humana de estas personas.
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Lo curioso del caso es que el video no fue filtrado por infieles, como habitualmente ocurre en estos casos. Fue el propio protagonista, quien lejos de avergonzarse de su noche de excesos, hizo público el video que lo hizo blanco de toda clase de críticas. Uno de los grupos a los que envió las fotos y videos fue "Campamento Sanjo10", integrado por unos 300 miembros exalumnos del colegio San José.
En sus tiempos de alumno de esa institución Canillas fue jefe de campamento, lo que creó con sus excompañeros un vínculo que perdura en el tiempo. Por esos envíos, fue eliminado del grupo.
El funcionario cartista, quien como asesor jurídico de Yacyretá tuvo en octubre ingresos por más de 118 millones de guaraníes, no habló hasta el momento del caso públicamente.
El tenor de los insultos y la violencia verbal y gestual con que los profiere, generaron un profundo rechazo de otros políticos, pero principalmente de la ciudadanía. En las redes apodaron al oficialista "Lord Canillas", como una ironía hacia su falta de modales y delicadeza. Muchos también consideraron que estaba bajo los efectos del alcohol u otras drogas y actuaba movido por el servilismo.
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Según declaró ayer la senadora Masi a ABC Cardinal, las agresiones e insultos de Luis Canillas no la amedrentan "pero sí ahuyentan a un grupo de gente buena que quiere hacer política y no está dispuesta a ser denigrada así". Dijo también que consideraba tomar acciones legales en el marco de la Ley Nº 5777, de Protección Integral a las Mujeres, que establece penas por agresión a través de formatos digitales.
Senadoras como Esperanza Martínez (Frente Guasu) y Blanca Lila Mignarro (PLRA) criticaron a Canillas por sus expresiones, y se solidarizaron con su colega.
Otros oficialistas consultados al respecto aseguraron no haber visto el video, a pesar de que fue ampliamente difundido en los medios y en las redes. Entre ellos el diputado Pedro Alliana, quien incluso se resistió a que se lo mostraran. Hoy también se difundió una foto de Alliana y Canillas en la que los dos muestran el dedo del medio.
El asesor de la EBY recibió este año la “medalla al mérito” de la Policía Nacional, de manos de Horacio Cartes. Canillas figura más de una veintena de veces en el cruce de llamadas con el excomandante de la Policía Críspulo Sotelo la noche del atraco a la sede partidaria del PLRA, cuando la Policía asesinó al joven Rodrigo Quintana.
También denunció un supuesto plan de “magnicidio” contra Cartes, basado en conversaciones de senadores disidentes en un grupo de WhatsApp.