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Desde temprano, la familia de Díaz Verón busca entorpecer la investigación por enriquecimiento abierta por el Ministerio Público. La audiencia indagatoria que debía realizarse hoy tuvo que suspenderse pues un abogado del estudio jurídico que los representa solicitó que se aplace y pidió copias del expediente, informó Gabriela González Escalada, periodista de ABC Color.
“Pedimos la suspensión para estar enterados de la denuncia y poder preparar bien la defensa técnica”, justificó el abogado Luis Fernando Olmedo, del estudio jurídico de Mario Elizeche. La carpeta la recibirían la próxima semana, pero aún no hay fecha de nueva audiencia.
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La mujer y los hijos de Díaz Verón están en la mira por indicios de producción mediata de documento público de contenido falso descubierto en torno a la la constitución de la firma familiar Canto Rodado SA.
De acuerdo a las investigaciones, la escritura de protocolización de Canto Rodado deja constancia que María Selva aportó G. 1.500 millones en efectivo y sus hijos Yerutí y Alejandro G. 500 millones cada uno, no obstante para eludir a la Secretaría de Prevención de Lavado de Dinero o Bienes (Seprelad) se consignó que la firma fue integrada con pagarés, pese a que una sociedad anónima debería tener capital integrado.
Además existen la sospecha de que se hicieron millonarias inversiones en una estancia chaqueña de la familia de María Selva, que tiene una extensión de 8.000 hectáreas.
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