Un asalto casi “calcado” en Itacurubí

Dos transportadores de caudales de la empresa Yrendagüe, provenientes de Ciudad del Este, fueron interceptados este martes en el km 78 de la Ruta II, alrededor de las 17:00. Cabe mencionar que ambos vehículos contaban con acompañamiento policial; es decir, una patrullera de Itacurubí los acompaño hasta el km 81 y a partir del siguiente ya quedaban a cargo de la comisaría de Eusebio Ayala.

Según el relato de testigos, a medida que los blindados avanzaban hacia la capital, en cercanías del km 78, divisaron varios vehículos varados presumiblemente a causa de los clavos conocidos como "miguelito". En ese ínterin, se adelantó una camioneta de la marca Chevrolet, tipo Blazer, cuyo ocupante comenzó a disparar contra los transportadores de caudales.

Al menos ocho personas tuvieron participación en el atraco, la mayoría vestidas con ropa camuflada. Las mismas utilizaron ametralladoras M 16 y hasta una .50, de tal forma a perforar el blindaje, informó Desiré Cabrera, corresponsal de ABC Color en el departamento de Cordillera. Los maleantes lograron detener la marcha de uno de los camiones, redujeron a sus ocupantes y literalmente vaciaron el mismo llevándose unas 15 bolsas con dinero.

El conductor del otro rodado evadió el atraco y logró dar la vuelva para retornar hacia Ciudad del Este. Por otro lado, una patrullera que nada tenía que ver con el operativo de seguridad quedó en el medio de la balacera. Felizmente, no hubo heridos. En el vehículo asaltado estaban los funcionarios José García Morel (chofer) Cantalicio Alvarenga Ortiz, Sergio González Vera y Francisco Flores Villalba, como encargado. Todos ellos fueron obligados a abandonar el blindado a punta de pistola. Los asaltantes abandonaron la camioneta Blazer y utilizaron otros dos vehículos para darse a la fuga.

De acuerdo a los indicios recogidos, este golpe fue prácticamente calcado al ocurrido el pasado 22 de marzo; de hecho, solo hay una distancia de 3 kilómetros entre el lugar de aquel hecho y el acontecido la tarde de este martes. En ambas ocasiones, los vehículos pertenecían a la misma firma: Yrendagüe. Asimismo, ambos atracos se produjeron un día martes: uno a las 14:00 y el otro a las 17:00, por parte de grupos comando que presuntamente manejan el movimiento de los blindados, especialmente aquellos provenientes de Alto Paraná.

Llama la atención que, a pesar de los antecedentes, no haya variado el esquema de seguridad para prevenir ilícitos de esta naturaleza; de hecho, se aplicó el mismo sistema de acompañamiento por parte de la Policía Nacional. Recién en el transcurso de este miércoles se realizará el arqueo correspondiente a fin de determinar el monto robado, aunque extraoficialmente se menciona que supera los G 3.000 millones, monto similar al robado durante el traco de marzo pasado.