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La escuela Juan Ramón Dahlquist alberga a 400 alumnos y cuenta con ocho aulas clausuradas desde 2015. Al menos 300 de los estudiantes se verán gravemente afectados por las obras que continúan en esta institución educativa, reportó el periodista Edgardo Romero.
Tendrán que dar clases en el patio o en otras zonas temporalmente. No cuentan con baños y las obras avanzan con gran lentitud. Recibieron la promesa de que la Secretaría de Emergencia Nacional les iba a proveer de baños portátiles pero no han llegado.
Las docentes se arreglan como pueden para tomar las pruebas de evaluación o dar su clase en mesas largas al costado de la cantina. En medio del ruido de las obras, los estudiantes tienen que escuchar un cuento y tratar de concentrarse para comprenderlo, relató la periodista Lorena Aponte.
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Vigas carcomidas y humedad en el techo hacen que esas aulas en refacción sean totalmente inhabitables, por lo cual los niños deberán soportar más tiempo dando clases a la intemperie, en medio de los martillazos y ruidos que generan los trabajos de refacción que aparentemente tardarán mucho más tiempo.
Por otra parte, el baño de la Escuela Ignacio A. Pane del barrio Republicano recibió a los estudiantes inundado de basuras y con varios inconvenientes que requieren inmediata reparación para su uso.
Otra institución que recibió a los alumnos en medio de obras inconclusas es la escuela República de Cuba, donde además aún hay salones clausurados.
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Esta mañana, la viceministra de Educación, María del Carmen Giménez, confirmó que actualmente hay 300 instituciones educativas cuya infraestructura está en situación crítica. Por ese motivo, tuvieron que posponer el inicio de clases en varias escuelas y colegios. Asimismo, alrededor de 3.500 escuelas necesitan mantenimiento de algún tipo.
Por su parte, el ministro destacaba que se necesita al menos US$ 600 millones de inversión por seis años para reparar todas las instituciones educativas del país.
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SAN LORENZO (Antonio Delvalle). Las clases en el Centro Regional de Educación Saturio Ríos se iniciarán recién el 1 de marzo debido a la falta de aulas. La construcción de las mismas recién comenzó en enero, por lo que las obras no pudieron concluirse a tiempo.
Según explicaron las autoridades educativas locales, se requieren de 15 salas para los 1.100 alumnos del nivel medio y técnico.
A modo de resolver parcialmente el problema, se optó por aulas móviles, pero hasta el momento una sola fue instalada.