En pie de guerra por agua

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Hartos de “mendigar” por agua, pobladores de Sajonia están en pie de guerra, ya que llevan dos meses sin el líquido vital. Un grupo se movilizará ante la falta de respuestas de la Essap, cuya ineficiencia se extiende además a otros puntos como Villarrica.

Ciudadanos de uno de los barrios más antiguos de Asunción manifiestan su hartazgo ante la creciente ineficiencia de la Empresa de Servicios Sanitarios del Paraguay (Essap), donde -lejos de encontrar respuestas- solo dan con más promesas.

Esta vez, los lugareños preparan una movilización para mañana a las 19:00. La cita es en la esquina de Melo de Portugal y Comandante Gamarra, desde donde prevén movilizarse hasta salir a la avenida Carlos Antonio López.

En la convocatoria, difundida a través de las redes sociales, los asuncenos señalan que al menos desde hace 50 días están sin agua potable. El problema “disminuye y afecta nuestra calidad de vida y la de nuestros hijos, ya que día a día debemos lidiar con la inoperancia e ineficiencia de una entidad del Estado inescrupulosa e irrepetuosa”, expresan.

Los pobladores ya se habían manifestado hace unas semanas en las inmediaciones del Palacio de Justicia y ya habían advertido que volverán a movilizarse mientras no encuentren una solución al problema que arrastran desde hace meses pero que se acentuó aún más desde noviembre de 2015.

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En octubre pasado, la Essap y el Servicio de Saneamiento Ambiental (Senasa) firmaron un convenio para la perforación de un pozo en el parque Carlos Antonio López, mediante una inversión de G. 32 millones, lo que resolvería el inconveniente crónico.

Aunque el pozo ya está excavado y se realizaron algunas otras excavaciones para las cañerías, hasta la fecha el servicio no mejora. El argumento dado a los afectados es que la falta de funcionamiento obedece a que la ANDE no provee energía.

Mientras los usuarios del barrio Sajonia deben lidiar con la falta de agua y las promesas de solución, la Essap envía cisternas a San Bernardino para recargar piscinas, como la del consejero de Yacyretá Gustavo Samaniego.

Otra de las localidades más afectadas por la falta crónica de agua es Villarrica, capital del departamento del Guairá, donde el problema de provisión data de hace años. Mientras, las autoridades de la aguatera estatal argumentan culpan a los cortes de energía y argumentan que igualmente hubo un aumento en la cantidad de usuarios.

La falta de previsión de la proveedora de agua se puso de relieve nuevamente la semana pasada, ya que miles de usuarios quedaron sin agua en Asunción, Lambaré, San Lorenzo, Fernando de la Mora y otras ciudades tras un incendio y posterior corte de energía en Lambaré, que afectó el centro de distribución en la zona.

Al ser consultado sobre la necesidad de contar con generadores, para mantener operativas las instalaciones de la Essap y evitar arrastrar los mismos problemas que se daban hace más de 40 años, desde la Essap reconocen que ello sería una solución pero tampoco existe un plan a corto plazo.