Aumenta tráfico de madera en la reserva Morombí ante nulo control

COLONIA YBYRA PYTÃ, distrito de Yby Pytã, Dpto. de Canindeyú (Alberto Núñez Barreto, corresponsal). Ante el nulo control de los agentes del Departamento de Bosques y Asuntos Ambientales (Deboa), aumenta el masivo tráfico de maderas, leñas, postes y carbón vegetal extraídos de la reserva Campos Morombí en la localidad de Colonia Ybyra Pytã.

El puesto policial ubicado en las inmediaciones del área protegida en este distrito se encuentra en total estado de abandono.

En varias ocasiones se pudo constatar que los uniformados designados para el cuidado del bosque no habitan la vieja caseta de madera que cae a pedazos.

Pobladores aseguran que “es normal” la salida de camiones de gran porte a plena luz del día, repletos con rollos de maderas y cientos de bolsas de carbón que fueron sacados del área protegida.

Los transportes cargados circulan con dirección a Canindeyú cruzando casi frente al puesto de control del Deboa, en la localidad de Ybyra Pytã. Los comerciantes ilegales también utilizan otros tramos hacía Santa Lucía (Alto Paraná) y Caaguazú.

Los depredadores arrasan con los bosques naturales ante la atenta mirada de todos. La tala de árboles es alarmante y se volvió descontrolada, dijeron.

Presunta complicidad

Deboa es el departamento encargado de “controlar y evitar” el tráfico de los rubros mencionados.

Además, la reserva se encuentra invadida desde hace varios meses por grupos de campesinos autodenominados “sintierras”, quienes siguen en el sitio a pesar de las reiteradas denuncias hechas por los responsables de Campos Morombí. 

Los mismos serían los encargados de los cortes de árboles nativos y de otras especies.

Se presume que existe cierto grado de complicidad entre las autoridades competentes para el control y los traficantes de madera y carbón. 

Según informaciones, funcionarios del Instituto Forestal Nacional (Infona) y del Deboa permiten la salida de los camiones.

Algunos efectivos policiales, que pidieron resguardar su identidad, reconocieron que “se ven obligados a coimear”, en concepto de mercaderías y algunos sobresueldos que finalmente van para “la corona”, es decir, a los bolsillos de los altos jefes policiales de Asunción.

Al respecto intentamos hablar con el comisario principal Obidio Venegas, jefe del Departamento de Bosques y Asuntos Ambientales, pero no contestó nuestras reiteradas llamadas telefónicas. Aguardamos que se comunique para tratar el tema.