El presidente Santiago Peña cumple mañana ocho meses de gestión gubernativa con un notable desgaste de su imagen y marcado descenso de su credibilidad. Peña vendió al electorado la imagen de un técnico joven, que estudió en el extranjero, munido con ideas modernas para implementar en su gobierno.
El copamiento total de las instituciones republicanas y órganos extrapoder nos permite colegir que Paraguay está al borde de una dictadura. Es verdad que restan que manden presos a opositores, proscriban los partidos políticos, censuren, encarcelen a periodistas y cierren los medios de comunicación. La historia nos recuerda que así lo hizo en la década del 80 el dictador Alfredo Stroessner, fallecido en Brasil en el 2006.
Pasó una semana de noticias insólitas y otras que confirman nuevamente que Paraguay está en manos del crimen organizado, que penetró todas las instituciones, como la Dinac o la Interpol. Vimos cómo un director del Ministerio de Agricultura estableció un “acuerdo” con representantes de un país que no existe: los Estados Unidos de Kailasa. El papelón se hizo público a través de las redes sociales de los supuestos representantes. El jefe de gabinete, Arnaldo Chamorro, destituido tras el escándalo, firmó el insólito documento.
Uno de los primeros desafíos del futuro canciller nacional, Rubén Ramírez Lezcano, desde el 15 de agosto, será la polémica mudanza de la embajada paraguaya en Tel Aviv a Jerusalén (Israel), hecho que causó una fuerte tensión diplomática en el 2018, provocado por el enfrentamiento entre Mario Abdo Benítez y Horacio Cartes.
El Poder Ejecutivo promulgó la ley que exonera de impuestos a las entidades deportivas nacionales para la importación de equipos, artículos e implementos deportivos a ser empleados en el marco de los XII Juegos Sudamericanos. El evento deportivo se llevará a cabo en Asunción entre el 1 y el 15 de octubre próximos.
“El hecho de ser país anfitrión de la Cumbre no otorga la capacidad de imponer el derecho de admisión sobre los países miembros del continente”, manifestó el jueves pasado el presidente de Argentina, Alberto Fernández, en su discurso ante la Cumbre de las Américas, que se celebró en Los Ángeles, con la presencia de mandatarios del hemisferio.