No hubo ninguna baja y los 29 jugadores -26 de campo y 3 porteros- que ya entrenaron en horario matutino volvieron a estar a las órdenes del cuerpo técnico por la tarde, en un entrenamiento que duró poco más de una hora y que, por primera vez en esta pretemporada, el balón ganó protagonismo y fueron mayoría los ejercicios en los que los futbolistas azules pudieron tocar el esférico.
El atacante uruguayo Nicolás Schiappacasse, cedido en el Grupo Pachuca y a prueba en la capital del Principado, completó sin problemas su segunda jornada de trabajo con el Real Oviedo y el portero francés Quentin Braat, que sigue dando pasos hacia adelante en su recuperación de hombro, trabajó casi al mismo ritmo que los guardametas del filial Marco Suárez y Víctor Egboh.
El entrenamiento se desarrolló en el campo nº1 de El Requexón y contó con la presencia de varias decenas de seguidores oviedistas, que aprovecharon para pedir autógrafos y hacerse fotos con los jugadores azules tanto antes como después de la sesión.
El Oviedo, además, anunció un nuevo amistoso -el último antes de empezar la competición en Tenerife- que les enfrentará a la Ponferradina de Primera RFEF el próximo sábado 5 de agosto, en el campo Vega de Anzo de Grao.
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