La rescisión fue anunciada en un escueto comunicado del club brasileño, en el que se aseguró que se trató de una decisión "de mutuo acuerdo" con el jugador de 39 años.
Raphinha, que tenía contrato hasta el final de 2025, admitió en sus redes sociales que se equivocó por haber decidido sumarse a las celebraciones del club alemán, con el que jugó ocho temporadas, sin avisar a la directiva de su actual equipo.
El Coritiba dio permiso a Raphinha para viajar a Alemania para resolver unos asuntos personales, su asistencia a una audiencia judicial celebrada el pasado lunes en Múnich.
Esa misma noche, aprovechando que estaba en la ciudad alemana, Raphina se vistió de corto para jugar un partido de fútbol siete organizado con motivo del 125 aniversario del club bávaro.
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El jugador de 39 años dijo que en el pasado, cuando jugaba en equipos como el São Paulo y el Olympiakos griego, participó "muchas veces" en eventos organizados por el Bayern, a los que "siempre" es invitado y donde le tratan con "reconocimiento".
Raphinha regresó al Coritiba, club en el que se formó, el pasado enero, tras pasar 19 temporadas fuera, en su mayoría en la liga alemana, en el Bayern y en el Schalke 04, y también con breves pasos por las ligas italiana y griega.
