La igualdad y la potencia física de ambas selecciones rivalizaron durante los 80 minutos de partido, pero fue la eficacia y puntería de Cooper a la hora de patear, lo que le dio la victoria a Australia.
Hasta siete golpes de castigo consiguió marcar Cooper, y también la transformación después del único ensayo de los Wallabies, que se anotaron la primera victoria en esta edición de The Championship.
