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La decisión fue tomada tras una reunión que mantuvieron miembros de la Federación Nacional Campesina (FNC) y labriegos de la zona.
Los campesinos decidieron no abandonar las fincas en conflicto porque aseguran que tienen origen fiscal y que el Estado debe buscar la forma de entregar los predios a los ocupantes beneficiarios de la reforma agraria. Sobre el tema, el dirigente de la FNC regional Caaguazú, Adrián Vázquez, manifestó que Guahory siempre estará en la resistencia y que en el lugar no hay negociación. Dijo que seguirán firmes en sus pretensiones y que no permitirán el “ataque” de los sojeros.
Explicó que el “preacuerdo de paz” al que habían arribado los campesinos de otro grupo con los productores “es un paño frío” al problema y que la compra de 322 hectáreas que prometieron las autoridades no es la solución para las múltiples necesidades. Además, dijo que la FNC no fue invitada para ese diálogo.
Sobre el tema, Jair Weber, vocero de los productores, manifestó que el conflicto en Guahory está lejos de una solución puesto que el caso está en los estrados judiciales pero que lastimosamente el proceso está paralizado. Agregó que siguen “en vigilia” y si el caso no es solucionado, volverán con el “tractorazo”.