Los agentes brasileños que se encontraban realizando una patrulla de rutina sobre la línea internacional, que divide esta ciudad de la brasileña Ponta Porã hasta que divisaron un camión de carga cuyo conductor estaba manipulando una carga en la carrocería. Este, al percatarse de la presencia de la patrulla policial, mostró una actitud sospechosa, por lo que los uniformados decidieron revisar la carga.
Sin embargo, cuando los agentes se acercaron al camión, apareció bruscamente en el lugar un vehículo de color oscuro, al cual el hombre que estaba en la carrocería del camión rápidamente ingresó para luego huir del lugar.
Los agentes verificaron la carrocería y encontraron un fondo falso en donde estaban ocultos los “ladrillos” de marihuana. El pesaje de la droga arrojó 761 kilos y 900 gramos.