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El fiscal Martín Cabrera había imputado a la pareja porque existen sospechas de que dinero de la Gobernación fue a parar a una cuenta conjunta de la pareja, en el Banco Visión. El movimiento bancario de ambos fue de G. 4.000 millones, entre el 2011 y este año.
Ahora, Otazú decidió embargar las cuentas N° 492826 y 928010 que la pareja posee en la Cooperativa Medalla Milagrosa (con saldo de más de G. 200 millones), y de la una del Banco Itaú, cuyo monto no trascendió.
A su vez, el magistrado ordenó la inhibición general de vender y gravar bienes con relación a los imputados, a los efectos de impedir que el patrimonio desaparezca.
La Fiscalía sospecha de lavado de dinero, porque la pareja no puede justificar los montos manejados. Esto, teniendo en cuenta que los salarios percibidos por los mismos no se condicen con la millonaria suma.