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Se trata de Francisco Zaracho Chamorro, de 30 años, supuesto autor del crimen del guardia de seguridad Agustín Figueredo, de 50 años, quien fue ultimado el 29 de enero de 2012 al intentar impedir que le robaran su escopeta con la que custodiaba un surtidor de Pedro Juan Caballero.
Según los datos obtenidos, Francisco Zaracho Chamorro y su mujer estaban en una especie de fiesta en el lugar conocido como “Faveliña”, en la antigua estación del ferrocarril de Ponta Porã.
En medio del encuentro, Zaracho mantuvo una discusión con su pareja, a la que agredió aparentemente de manera brutal.
La víctima, entonces, salió del sitio y se refugió en su casa, donde estaban dos de sus sobrinos, uno de nombre Gustavo y el otro Javier.
Estos convencieron a su tía de que les contara quién la había agredido, y luego salieron directamente para ir a buscar al agresor.
Después de unos minutos, localizaron a Zaracho Chamorro y lo atacaron. El reporte de la Policía brasileña señala que fue degollado.
Los dos autores del homicidio, al menos hasta anoche, seguían fugitivos, según los medios de prensa brasileños.