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SAN JUAN BAUTISTA, Misiones (Rafael Marcial Montiel, corresponsal). Silvio Ramón González es todo un ejemplo de esfuerzo, perseverancia, dedicación y trabajo.
A pesar de su ceguera, limpia el patio de su casa con machete, usa el hacha, hace leña y alambra terrenos. Además, ayuda con las tareas de la casa.
También estudia el bachillerato en el Centro Educativo Maestros Rurales del barrio Yataí, distrito de San Juan Bautista. Su espíritu jovial y ganas de superación inspiran a sus compañeros de estudio.
Su pareja actual, Mirta Servín, madre de uno de sus hijos, es su guía. Lo lleva hasta el colegio todos los días.
Luego de concluir el nivel secundario, su mayor anhelo es ingresar a la Policía Nacional para orientar a los oficiales y capacitarlos para trabajar con las personas de la tercera edad y con discapacidad.
También se prepara para ingresar a la Facultad de Derecho de la Universidad Nacional de Asunción (UNA).
“Los uniformados no están preparados para tratar a los no videntes, personas de tercera edad y con discapacidad. Yo mismo fui golpeado por un policía en Asunción y a raíz del maltrato y la depresión estuve a punto de tirarme delante de un ómnibus”, comentó González, quien perdió la vista luego de un accidente que sufrió cuando trabajaba en una estancia situada en eldepartamento de San Pedro.
Tiene varios certificados de estudios del Servicio Nacional de Promoción Profesional (SNPP). Es electricista, operador de computadora, telemarketing, trabajo en equipo, creador y administrador de sus propios negocios, recepción y uso de teléfono, atención y servicio público, oratoria, relaciones humanas y públicas.