Asombro andaluz

La mesa de centro tiene una tapa de cristal belga, obra del arquitecto Hilario Gómez Núñez, quien se encargó del interiorismo y la ampliación, así como la jardinería de esta bella casa. Aprovechó la altura y colocó puertas de demolición sobre muros en la entrada, acompaña una colección de espejos ecuatorianos y peruanos. Todos los muebles son paraguayos; por ejemplo, el banco rústico, hecho a partir de un arado. Entre los objetos se destaca un Niño Jesús y ángeles tallados en piedras.

Elmentos exóticos también intervienen, como la lámpara de Dubái; dos retratos hechos por Nati Cañada, pintora oficial de la familia real de España; además, los azules y turquesa definen el estilo andaluz de la residencia, aunque se permiten aportes de los tejidos de Bolivia, a modo de cortinas y las alfombras de Alhambra. Es un lugar ideal para estar con los hijos y nietos.

Las mesas de apoyo y cómoda son obras de Eduardo Huergo, igual que las sillas fraileras. A un costado del área social se halla la chimenea, coronada por un espejo antiguo.

Las obras de arte corresponden a 20 pintores paraguayos contemporáneos; entre ellos, Pindú, Josefina Plá, Bernardo Krasniansky, Andrés Cañete, Livio Abramo, Ricardo Migliorisi, Enrique Careaga, Carlos Colombino, Lotte Schulz, entre otros.

La gran cantidad de árboles, entre ellos, pinos y eucaliptus, conforman un bosque, lo que sorprendió al dueño de casa, quien la bautizó con el nombre de “El asombro”.

Comedor y galería

Las sillas del comedor lucen un tapizado renovado, va muy bien un espejo art decó con piedras y la lámpara de La Metalúrgica, junto con la artesanía del Chaco. Allí se encuentra una colección de botellones y candelabros de peltre. En la galería aguardan a los visitantes las preciosas hamacas de poyvi y los muebles todo terreno a la luz de los faroles. La parrilla y los pisos tienen incrustaciones de azulejos pintados, en una atmósfera inspirada en las casas de Andalucía.

mirtha@abc.com.py Fotos Virgilio Vera