Por el Día de la Mandioca dijo que también es una fiesta para la industria almidonera de nuestro país, que exporta el producto a diversos mercados, extraído de la raíz de es noble y rústico renglón de la agricultura familiar campesina.
Informó que el almidón Fepy se comercializa en Brasil, Bolivia, Argentina, Colombia, entre otros, así como también a nivel local, a industrias de chacinados, chiperías, papelerías, entre otros.
Destacó que la industria la Joya da empleo directo a unas 15 personas y a otras 25 en forma indirecta, además de generar ingresos para centeneras de productores que le proveen la materia prima.
Henrich admitió que el 2020 fue un año difícil tanto debido a la pandemia que afectó a todos los mercados, así como por la sequía que se registró en nuestro país durante los meses de agosto, setiembre y octubre.
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Sin embargo, indicó que la demanda internacional permitió que se pueda pagar un precio promedio equilibrado al pequeño productor, por la materia prima. Opinó que una manera de mejorar la rentabilidad de la mandioca es aumentando los rendimientos, lo que requiere asistencia técnica a los pequeños productores.
La planta industrial La Joya se encuentra en el distrito de Caaguazú y opera desde el año 2017.
Sobre el nombre de la firma, comentó que es porque consideran a la mandioca como una “joya”, porque tiene muchas ventaja sobre los otros cultivos de la agricultura familiar, ya que no es necesario cosecharla en un año, se puede esperar hasta dos años, lo que le da la oportunidad al productor de esperar mejores precios.
A su vez, el subproducto, que es el almidón, bien almacenado, tiene durabilidad de hasta dos años. También manifestó que para la industria el cuidado del ambiente es de fundamental importancia, por lo que realizaron las inversiones correspondientes para el tratamiento de los efluentes.