La escultura estuvo a cargo del artista plástico Javier Guggiari, quien mencionó que le llevó siete meses la creación de la obra. La kuñataĩ mide poco más de un metro y tiene el rostro de Clarita Sosa Perdomo, en quien Guggiari se inspiró para plasmar la escultura. Dijo también que el rostro de la kuñataĩ debía representar el amor inmaterial, que no esté al alcance de todos.
La kuñataĩ se encuentra en el Hotel del Lago, ubicado en el centro de la ciudad de San Bernardino, donde los visitantes podrán observarlo sin ningún costo.
La obra fue llevada a cabo por el Hotel del Lago y la Fundación Demetrio Ortiz y apoyada por la Secretaria Nacional de Cultura (SNC), la Municipalidad de San Bernardino y la fundación Itaú.
El intendente de la ciudad, Luis Aguilar (PLRA) explicó que San Bernardino se apoderó de la kuñataĩ, que bien podía estar en otras ciudades con cuencas al Lago; sin embargo, está en la villa veraniega y se convierte en el símbolo de este distrito.

La kuñataĩ
Esperanza Ortiz, hija del artista Demetrio Ortiz, explicó la historia de la bella guarania que representa al Paraguay ante el mundo y la historia de la kuñataĩ. “Recuerdos de Ypacaraí” simboliza una historia de amor que no pudo ser vivida.
Según las explicaciones, en el verano de 1946, Demetrio Ortiz se hospedaba en el Hotel del Lago, desde donde una tarde observó a una bella muchacha, a quien invitó a un paseo por las playas del Lago Ypacaraí. Entre conversaciones, Demetrio le comenta que es artista; entonces, la joven comienza a interpretar canciones en guaraní. Demetrio Ortiz debía volver a Asunción y la promesa fue que iría a visitarla cada vez que pudiera.
Esa promesa no pudo ser cumplida debido al estallido de la Revolución de 1947 y Ortiz fue exiliado a la Argentina.
Años más tarde, Ortiz tuvo un problema de salud y el médico le pidió que recuerde los momentos bellos que había vivido. Entonces comienza a escribir los versos de la canción “Recuerdos de Ypacaraí”, que fue interpretada en una peña donde Zulema de Mirkin completó la canción.

Recuerdos de Ypacaraí
La canción fue interpretada por primera vez en 1952, pero los versos fueron escritos e interpretados en una peña en 1948. La canción posicionó a nivel mundial al lago Ypacaraí y el Paraguay. La canción rinde homenaje a una joven que representa el amor inmaterial y que no pudo ser para Demetrio Ortiz.
La canción fue interpretada en más de diez idiomas en todo el mundo. Además, ha sido interpretada por Julio Iglesias, Caetano Veloso, el trío Los Panchos, Jorge Cafrune, Teresa Parodi y Maya Belsitzman.
Durante el acto de descubrimiento de la kuñataĩ, la canción fue interpretada en japonés por Toshiko Nezu Sandoval.