Según explicó Flores, esta propuesta buscaría aumentar de 50 a 70 dólares una pensión básica universal que han recibido ancianos y personas con discapacidad, además de aumentar el número de beneficiarios de 37.000 a 60.000.
Afirmó que el presupuesto para materializar esta propuesta saldría de recortes a la compra de publicidad, de vehículos blindados, armamento, entre otros.
"Traemos una propuesta concreta, realizable, que ha sido completamente descartada por el actual régimen", indicó y acusó al actual Gobierno de haber abandonado "la pensión universal de los adultos mayores", un programa que venía de gobiernos anteriores.
Afirmó que 22,2 millones de dólares (de la pensión universal) "fueron recortados de este presupuesto desde que entro este Gobierno".
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"No les importan los adultos mayores, solo con el presupuesto del bitcóin, que son casi 33 millones, pudieron haber financiado 15 veces esta pensión", dijo en un evento la central localidad de Mejicanos, en San Salvador.
El FMLN, exguerrilla que se convirtió en partido tras el final de la guerra civil (180-1992), lleva como aspirante al Ejecutivo a Flores, un exdiputado de la Asamblea Legislativa, y a Werner Marroquín, un sindicalista y residente en el exterior, como candidato a Vicepresidente.
Los candidatos del partido de izquierda fueron los primeros en inscribirse ante el Tribunal Supremo Electoral (TSE) para participar en las elecciones generales 2024, donde el presidente Nayib Bukele buscará con Nuevas Ideas (NI) su reelección inmediata, a pesar de los señalamientos de que es inconstitucional.
En 2009, el FMLN ganó la presidencia de la mano del periodista Mauricio Funes (2009-2014), ahora nacionalizado nicaragüense y procesado en territorio salvadoreño por diversos casos de corrupción.
A Funes le sucedió en 2014 el excomandante guerrillero Salvador Sánchez Cerén -también nacionalizado nicaragüense-, con un "compromiso irrenunciable con la justicia social".
Los casos de corrupción ligados al expresidente Funes y el hartazgo de la población sumieron al partido de izquierda en una debacle electoral, siendo la tercera fuerza política en la Asamblea Legislativa con apenas cuatro diputados de los 84.
