La pareja es acusada en Brasil de comprar armas en Croacia, Turquía, República Checa y Eslovenia para luego hacerlas llegar a Paraguay, desde donde las revendían al Primer Comando de la Capital (PCC) y al Comando Vermelho (CV), las mayores organizaciones criminales brasileñas.
Dirisio -de nacionalidad argentina- y su esposa fueron detenidos en febrero pasado en la provincia de Córdoba por miembros de la Policía Federal de Argentina que integran Interpol, pues sobre la pareja pesaba una orden de captura internacional con circular roja solicitada por la Justicia brasileña.
El objetivo del pedido de extradición, que aún está en trámite según confirmó a EFE la superintendencia de la Policía Federal en el estado de Bahía (noreste), es que tanto el empresario argentino como su esposa sean juzgados en Brasil.
Las investigaciones sobre el caso comenzaron en 2020 tras una incautación de armas en Vitória da Conquista, municipio del estado de Bahía.
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Según la Policía Federal brasileña, una empresa con sede en Asunción era la responsable de importar miles de pistolas, rifles y municiones de varios fabricantes europeos en Croacia, Turquía, República Checa y Eslovenia.
Las armas eran importadas desde Europa a Paraguay, donde les raspaban el número de registro para luego venderlas a grupos de intermediarios que operaban en la frontera entre Brasil y Paraguay, que luego las revendían las principales facciones criminales de Brasil.
Los datos de la Policía señalan que desde el inicio de las investigaciones, la empresa acusada importó alrededor de 43.000 armas para Paraguay, moviendo alrededor de 1.200 millones de reales (unos 244 millones de dólares o 222 millones de euros) en 3 años.
Durante este período se realizaron contra la organización 67 operativos de incautación en 10 de los 27 estados brasileños, en los que fueron decomisadas 659 armas.
La empresa en cuestión fue desmantelada en diciembre pasado durante un operativo conjunto de las Policía Federal y la Fiscalía General de Brasil, con el apoyo de la Secretaría Nacional Antidrogas del Paraguay y el Ministerio Público de ese país, del que lograron escapar Dirisio y su esposa, que dos meses después fueron detenidos en Argentina.
