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PEDRO JUAN CABALLERO (Gilberto Ruiz Díaz, corresponsal). El atentado se produjo ayer de mañana sobre la calle Naciones Unidas, a 500 metros del portón principal de la cárcel de esta ciudad.
El agente penitenciario ultimado fue Juan Carlos Valiente Quiñones, de 37 años, oriundo de Yby Yaú, departamento de Concepción, pero que vivía con su familia en Pedro Juan Caballero desde que empezó a trabajar en la cárcel local, hace menos de dos años.
El funcionario del Ministerio de Justicia entregó su guardia ayer temprano y subió a su motocicleta para dirigirse a su casa.
Cuando transitaba aún por la misma calle empedrada del penal, fue alcanzado por otra motocicleta en la que estaban dos hombres.
Los sicarios lo siguieron de cerca por unos momentos, como para asegurarse de la identidad de su objetivo. Recién cuando confirmaron que se trataba del guardiacárcel, abrieron fuego en pleno desplazamiento presuntamente con una pistola Glock, calibre 9 milímetros.
El custodio cayó muerto en el lugar y los matones escaparon hacia el centro de la ciudad.
Sospechas
Sobre el móvil del crimen, la Policía manejaba hasta anoche al menos dos hipótesis principales. Ambas coincidentemente apuntan al clan Rotela.
Una de ellas sostiene que el asesinato de Juan Carlos Valiente Quiñones podría obedecer a una represalia porque supuestamente el citado guardiacárcel permitió que internos afiliados a la facción PCC torturaran a otros reos identificados como del clan Rotela.
La otra versión señala que los jefes del clan Rotela se molestaron porque uno de ellos fue trasladado el fin de semana, luego de la requisa sorpresiva que se hizo en el penal de Pedro Juan Caballero el viernes último.
Aparentemente, Valiente estaba identificado como uno de los protectores de los miembros del PCC, ya que desde hace un buen tiempo cubría el pabellón que controlan los reos del citado grupo.
El director de la cárcel local es Luis Esquivel.