Virgen de la Candelaria: presbítero Machado recomienda conservar la fe y la devoción

La feligresía católica de Atyrá celebró con alegría la víspera de la Virgen de la Candelaria. A partir de las 19:00 numerosos fieles realizaron la tradicional procesión desde el portal de acceso de la ciudad.

Cientos de feligreses de todas las generaciones portaron velas y rosarios, todos vestidos de blanco, representando de esa manera la luz de la Virgen, que es la advocación mariana de la religión católica.

Asimismo, se pudo observar las calles alegres pintadas de blanco. Durante el trayecto de la procesión también marcaron presencia la banda de músicos de la Dimabel, La Caballería de Atyrá, el cura párroco Felipe Martínez y el intendente Juan Ramón Martínez (ANR).

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Todos los pobladores se hicieron presentes con entusiasmo, cada uno con sus candelabros y banderas blancas.

Al término de la procesión, los feligreses se dirigieron hasta el templo San Francisco de Asis, dónde se pudo apreciar una maravillosa entrada iluminada de luces, banderas y telas blancas.

Una importante cantidad de personas llegó hasta la celebración religiosa para ser bendecida. Se tuvo visitantes de Argentina y Uruguay que fueron a conocer esta tradición.

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Conservar la fe

La misa de la víspera estuvo presidida por el presbítero argentino Javier Machado, Superior Provincial de los Redentoristas, quien en su homilía resaltó la importancia de conservar la fe y la devoción porque eso es lo que nos da vida.

Indicó que la noche blanca significa paz, iluminar y bendecir. “Las luces y todo lo blanco representan la expresión de la paz que tenemos que tener cada uno”, expresó.

“Es una noche hermosa y bendecida porque vemos la unión de la familia. Eso es lo que expresamos con la fe que sentimos como comunidad”, agregó.

Dijo, que los cristianos no deben olvidar que el señor es luz y que con esa luz necesitamos reconocernos para vivir una vida llena de plenitud.

El sacerdote agradeció a Dios y a los presentes por permitirle compartir con ellos en esta festividad que une a tantas familias. “Esta noche bendecida e iluminada por el señor, es signo para recordar, fortalecer la fe y tener presente a nuestro Dios”, enfatizó el presbítero Javier Machado.

La misa central está prevista para mañana 2 de febrero a las 8:00 y será presidida por el presbítero Natividad Olmedo.