Zanjón está a punto de “tragar” a un barrio de San Antonio

SAN ANTONIO. Pobladores del barrio San Roque de esta localidad exigen la reparación de varias calles que se encuentran convertidas en zanjones. Una parte de la comunidad está dividida en cuatro partes por una enorme zanja y en días de lluvia es imposible salir del lugar. El problema arrastran desde el año 1997 y muchos ya no pueden ingresar a sus casas en vehículo.

La calle San Francisco, del barrio San Roque, se interrumpe en una enorme zanja que fue formada por raudales, y es un peligro mortal para los lugareños.
La calle San Francisco, del barrio San Roque, se interrumpe en una enorme zanja que fue formada por raudales, y es un peligro mortal para los lugareños.abc color

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Un zanjón de varias cuadras mantiene divido a los vecinos del barrio San Roque de la ciudad de San Antonio, y varias casas ya están a punto de ser “tragadas” por la zanja, que con cada lluvia se agranda debido a las erosiones. Varias calles se encuentran afectadas por la zanja y los lugareños exigen la urgente reparación a la Municipalidad para evitar que ocurra alguna tragedia en la zona, porque salir del lugar en días de lluvia es toda una odisea.

Es imposible seguir viviendo en estas condiciones, la zanja sigue corriendo y cada vez se hace más grande. Muchos de los vecinos ya no pueden entrar a sus casas en sus vehículos y tienen que dejar en otro lugar y merced de los delincuentes”, expresó una vecina y presidenta de la comisión vecinal, Mercedes González.

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Dijo que con cada precipitación grande la zanja va creciendo y las permanentes erosiones ponen en peligro una escuela y varias casas del barrio. Muchos construyen muros con la idea de proteger sus propiedades, pero la furia de los raudales lleva todo por delante.

Arrastran el problema desde 1997

Los lugareños indicaron que sufren este problema desde el año 1997 cuando una lluvia grande arrastró el empedrado de la calle San Francisco. Desde entonces empezó el suplicio y actualmente la erosión es insostenible, la zanja cada vez más profunda ya afecta a varias arterias.

“Desde 1997 estamos con este problema, ya han pasado varios intendentes, gobernadores e incluso ministros, pero nadie se ocupó de la zanja, que hoy día ya es una amenaza para los lugareños por las erosiones. Precisamos una ayuda urgente”, expresó Mercedes González.

Dijo que por la envergadura de los trabajos a realizarse en la zona ya obliga buscar un convenio interinstitucional para poder buscar una solución definitiva; se precisa de alcantarillado de varias cuadras.

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“Ya no podemos salir de la zona, con la lluvia de ayer casi nos ahogamos todos porque una rama se atoró frente a mi casa y el agua nos arrasó. El intendente, Santiago Aguilera, no nos hace caso; es más, nos pidió una suma para la construcción de empedrado, pero ni aún así tenemos respuesta”, expresó Frida Lesme.

Ante la grave y preocupante situación en que viven muchos pobladores del mencionado barrio, le consultamos al intendente Santiago Aguilera (PLRA) sobre algún proyecto para la zona, quien solo se limitó a decir que están trabajando para solucionar.

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“Estamos trabajando sobre eso para dar solución”, fue la escueta respuesta del jefe comunal a los pobladores que viven en constante zozobra desde hace 27 años.

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