El 25 de mayo, George Floyd falleció en manos de un policía en Powderhorn, Minneapolis. La muerte (por asfixia según la última autopsia) del afroamericano desató una serie de protestas y manifestaciones que hasta llegaron a la Casa Blanca, que aisló el domingo al presidente americano Donald Trump como medida de seguridad. Mientras Estados Unidos convive con los disturbios en varias ciudades, el resto del mundo expresa su indignación por el hecho y deja un mensaje contra el racismo.
El fútbol también forma parte del homenaje a Floyd. Algunos jugadores, como ocurrió en Alemania, reclamaron con frases gravadas en camisetas. En Inglaterra, una imagen del Liverpool fue viral: los jugadores clavaron la rodilla contra el césped de Anfield, un gesto que ganó popularidad cuando en 2016 Colin Kaepernick, de los San Francisco 49ers de la NFL, realizó la misma postura, agachando la cabeza, como señal de protesta a los abusos raciales.
La posición de los líderes de la Premier League recorrió el mundo y fue un modelo para el resto de los equipos de Inglaterra, que se unieron a la situación. El Newcastle de Miguel Almirón, previo al entrenamiento de este martes, publicó una fotografía con una palabras en inglés que significan unidad: #UnitedAsOne. Por su lado, en Londres, el Chelsea apoyaron el movimiento #BlackLivesMatter (las vidas negras importan) con la figura de una H, en honor a los humanos.

