El primer campeonato del año reinicia la actividad luego de 130 días de suspensión a causa de la pandemia del coronavirus. El torneo Apertura fue postergado el 13 de marzo a través de un comunicado emitido por la Asociación Paraguaya de Fútbol (APF) a horas del comienzo de la jornada nueve. Desde entonces, no hubo fútbol: el último partido del certamen fue el 8 del mismo mes, fecha en que Olimpia festejó un agónico empate contra River Plate. Hoy, 135 días después, la pelota vuelve a rodar con el Kelito como uno de los protagonistas.

Daniel Garnero había guardado a los titulares porque en la semana disputaba un partido clave en la Copa Libertadores. El 1-1 en Manta con el Delfín, obligaba al Decano a triunfar en la segunda ronda de la fase de grupos para quedar relegado de los puestos de clasificación a octavos de final. Por ende, ante el Kelito, que alineó a los mejores y buscaba olvidar la eliminación de Copa Sudamericana, el entrenador argentino eligió una formación alternativa. De todas maneras, el margen de error era nulo porque Libertad goleó 5-1 a General Díaz y lideraba con seis de ventaja.
Posterior el cero a cero de los primeros cuarentena y cinco minutos, las emociones quedaron para la etapa complementaria. Sorpresa, el visitante rompió el marcador en Para Uno con el tanto de Marcelo González a los 64′. El rival aguantó el empuje del local, que tenía a Emmanuel Adebayor en cancha. El togolés que rompió el mercado de pases en febrero, pero dijo adiós en marzo a causa del covid-19. El exReal Madrid voló a África y por falta de vuelos, no retornó. Mientras tanto, Brad Norman viajaba de Sudáfrica, con escala en Estados Unidos, con destino a Luque.

La desesperación y la necesidad llevaron a Garnero a ingresar a Roque Santa Cruz. La dupla que también jugó en el Manchester City buscaba la igualadad. A los 88 minutos, en una posición defensiva, el propio González, quien convirtió el 1-0 parcial, desvió con la mano un cabezazo de Hugo Fernández. El juez no dudó y marcó penal. Jorge Recalde, refuerzo de Olimpia para la temporada, cargó con el compromiso y remató.... Pablo Gavilán atajó el tiro. El cronómetro marcaba 90', cuando el asistente informa al árbitro que el portero estuvo adelantado.
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Recalde debía repetir la ejecución. El exLibertad siguió con la carga y esta vez anotó. Eligió el mismo sitio del remate errado, pero Gavilán clavó la rodilla en medio de la portería. El mediapunta estalló un sin fin de emociones, festejó sin camiseta y soltó la cadena: miró a los hinchas y tomó los testículos gritando “gol carajo... gol carajo”. Para el Decano valió el empate, pero el jugador vio la roja después del informe del VAR y recibió cuatro fechas de suspensión. El conjunto de Celso Ayala, que no mereció perder, sumó un punto y escaló al séptimo lugar de la clasificación.
