Hamás, un facción palestina islamista, lanzó más de 1.600 cohetes contra las ciudades de Jerusalén y Tel Aviv, en otras, provocando la reacción de Israel, que defiende el territorio con el sistema antimisiles Cúpula de Hierro y también responde atacando la Franja de Gaza. El conflicto, por razones religiosas muy complejas, genera temor en los habitantes locales como también en los extranjeros, en nuestro caso, las jugadoras Dahiana Bogarín y Deisy Ojeda y el futbolista Santiago Ocampos (exJuventus de Turín), paraguayos que conviven con un escenario casi de guerra, impensado en Sudamérica.

“Es preocupante. Yo pensé que estas cosas pasaban en las películas, pero ahora lo estoy viviendo en persona. Nunca pensé pasar por esto, pero estamos bien gracias a Dios”, revela Bogarín a ABC desde la localidad de Hadera, al norte de Israel. Hasta el momento, las autoridades del pueblo no emitieron ninguna alarma a través de las sirenas, que alerta a los ciudadanos para que busquen refugio por un posible ataque. “Nosotras vivimos en una casa y tenemos una habitación como un sub suelo, que da para refugiarse mientras pasa esto”, añade la mediocampista del Maccabi Kishronot Hadera de la Ligat Nashim, la primera división femenina.

Aunque el centro de los ataques de Hamás son Jerusalén o Tel Aviv, Bogarín admite que junto a Ojeda, con quien vive y juega, están en estado de alarma. “Por el momento no pasamos aún nada, pero igual estamos atentas a cualquier alarma. Es desesperante ver estas cosas, en la noticia, en todas partes. Gente inocente muriendo, heridos por todos lados. Es muy triste”, continúa. “Hasta el martes no estaríamos entrenando. Esta todo paralizado”, cuenta la integrante de la Albirroja, que llegó a Israel en noviembre de 2020 y firmó hasta el 31 de mayo de este año. “Estoy entrenando en la casa sin parar y obviamente, sin salir”, agrega.

A pesar de no sufrir hasta el momento ningún ataque en Hadera, Bogarín reveló el miedo que siente y aseguró que “cualquiera quiere ir a su país” por las condiciones de la región. “Ahora mismo cualquiera quiere ir a su país. Como estamos en el torneo y la otra semana ya jugamos, no hay otra que esperar, pero si esto continúa, dependería de las aerolíneas”, afirmó la exCerro Porteño. La aerolínea española Iberia, con ruta Madrid-Tel Aviv, suspendió los vuelos de este jueves y viernes, mientras que las estadounidenses Delta y American Airlines también paralizaron los viajes, según AFP.
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“Tengo mucho miedo, como te dije, nunca en mi vida pensé que iba a pasar esto. Pero bueno, acá estoy y a esperar que todo pase. Todo está bien hasta el momento. Nos queda jugar dos partidos y luego volver a Paraguay si Dios permite”, culminó Bogarín, expresando el temor que siente por la escalada de violencia, la peor de los últimos años, que registra como saldo la muerte de más 83 palestinos en Gaza, 17 de ellos niños, mientras que Israel tiene siete personas fallecidas, entre ellas un niño y una adolescente, por el disparo de cohetes.
