La Federación Internacional de Asociaciones de Futbolistas Profesionales (FIFPRO) informó este jueves del fallo del tribunal, que ve "censurable" que se permitiera jugar a Martins sin pruebas médicas completas y sin la provisión de instalaciones adecuadas en el Estadio Municipal de Lafia, lugar en el que se produjo el fallecimiento.
El defensa murió a los 25 años cuando jugaba en el Nasarawa United en la primera división nigeriana en marzo de 2020 en un partido en el que, según un informe publicado este año por la NFF, no había "ni un médico ni un fisioterapeuta", además de "ninguna ambulancia funcional en el estadio" en ese momento.
La familia de Martins fue asesorada por los abogados de FIFPRO y será indemnizada ya que el tribunal consideró que "la liga, la NFF y el comisario del partido también tenían la obligación de garantizar que el club cumpliera la normativa pertinente", algo que se incumplió.