Un estreno descomunal como titular para un delantero de la cantera 'nerazzurra' que siempre soñó con marcar con esa camiseta. A sus 19 años, cuenta ya con dos años de experiencia en Serie B, con el Spezia, donde se desfogó siempre bajo la atenta mirada de un Inter que ahora saborea los frutos de la cesión.
"Todavía no me lo creo, parece un sueño. Estaba gritando, miré a mi alrededor y vi a Lautaro celebrando", dijo emocionado tras el partido.
Aunque favorecido por la lesión de Marcus Thuram; la complicada situación de Mehdi Taremi, bloqueado en Irán por la guerra con Israel; y las salidas de Marko Arnautovic y Joaquín Correa; sus pasos con el Inter son veloces, pues debutó en la segunda jornada de la fase de grupos ante el Urawa japonés, duelo en el que jugó 45 minutos.
"Esto es el fruto de todo el trabajo de estos años, también en el Spezia, trabajando duro. Estoy muy contento. Vi a mi hermano y corrí a abrazarlo", añadió.
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Su futuro para la próxima temporada es incierto. La afición interista pide ya una ficha con el primer equipo para esta campaña, pero hay equipos de Serie A interesados en él.
A su favor juega que el rumano Cristian Chivu, entrenador del Inter, le conoce muy bien porque fue su entrenador durante su etapa en la cantera.
"Este es un premio a su inteligencia, a su trabajo. Es un chico que eligió ir a jugar a otra categoría, hizo dos grandes temporadas en el Spezia, ha crecido y madurado mucho. Le conozco desde que era más bajo que yo y sé que mantendrá los pies en el suelo", ponderó el técnico.
"La gente cree que sólo es bueno en el área, pero no es así, es bueno en todas partes, se defiende en todas las zonas del campo", apuntó.
Francesco Pio Esposito pudo celebrar su gran día con su hermano Sebastiano, también jugador del Inter tras regresar de cesión con el Empoli. Ambos forman parte del trío de hermanos más famoso del fútbol italiano. Es el más pequeño.
"Enhorabuena a la familia, que ha criado tres grandes chicos. Incluso había pensado en jugar con él y Sebastiano juntos, les había preguntado si lo habían hecho alguna vez y me dijeron que no, así que se me ocurrió, pero Pio estaba demasiado cansado. Habrá otra oportunidad...", comentó Chivu.
Esposito, el apellido más famoso del 'calcio'
Los Esposito, nacidos en la región sureña de Campania, son futbolistas todos criados en la cantera del Inter, aunque el mayor de ellos, Salvatore, es ya propiedad del Spezia, donde jugó con Pio.
Han sido protagonistas en los últimos años por las curiosidades que han provocado.
El 24 de noviembre de 2023 entraron en la historia del fútbol italiano al jugar los 3 en el mismo partido, un Sampdoria-Spezia de Serie B, emulando a los hermanos Pellegrini (1988) y a los Sentimenti (finales 40 y principios 50).
En septiembre de 2024 se convirtieron en el primer trío de hermanos en marcar en el mismo fin de semana en el fútbol profesional.
Y el 11 de junio de 2023 rubricaron el único momento negativo ligado a su apellido: aquel fatídico día, los tres jugaron un partido a la vez y los tres perdieron.
Sebastiano perdió con el Bari la final del 'playoff' del ascenso a Serie A contra el Cagliari por un gol en el tiempo añadido; Salvatore perdió con el Spezia el partido de desempate contra el Hellas Verona (certificó su descenso a la Serie B); y Francesco Pio perdió con Italia la final del Mundial Sub-20 contra Uruguay.