29-30. Francia sobrevive y España se jugará el pase a la final con Dinamarca

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Redacción deportes, 26 ene (EFE).- La selección francesa de balonmano no sólo se clasificó para las semifinales del Europeo de Hungría y Eslovaquia, sino que lo hizo como primera de grupo tras imponerse este miércoles por 29-30 a Dinamarca en un encuentro en el que tenía una desventaja de cinco goles (26-21) mediado el segundo tiempo.

Pero nunca hay que dar por muerto al equipo francés, el vigente campeón olímpico, que con una espectacular remontada selló su presencia en unas semifinales en las que se medirá con Suecia, mientras que Dinamarca será el rival de España.

Cruces que nadie hubiera podido imaginar tras unos primeros cuarenta y cinco minutos de juego, en los que Francia pareció abocada a quedarse fuera del torneo, dada la superioridad del conjunto danés.

Ni la ausencia de sus dos grandes estrellas, los laterales Mathias Gidsel y Mikkel Hansen, a los que el seleccionador danés, con el billete ya asegurado para las semifinales otorgó descanso, mermó el rendimiento de una Dinamarca que a los cinco minutos de juego contaba con una renta de cuatro goles (5-1) en el marcador.

Niklas Kirkelokke, en el lateral derecho, y Jacob Holm, en el izquierdo, no tardaron en hacer olvidar las ausencias de Gidsel y a Hansen con una sensacional actuación.

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Si Kirkelokke demostró poseer un poderoso lanzamiento, Holm, que ya tuvo un papel protagonista en el equipo danés tanto el pasado Mundial de Egipto como en los Juegos Olímpicos de Tokio, evidenció además de una gran efectividad su capacidad para explotar el más mínimo espacio dejado por la defensa francesa.

Entre Holm, que cerró la primera mitad con seis dianas tras errar un sólo lanzamiento, y Kirkelokke, que sumó otras seis, tras fallar dos, contabilizaron dos tercios de los 17 goles que Dinamarca logró en la primera parte.

No menos sensacional estuvo el portero danés Kevin Moller, que con las nueve paradas, una de ellas de penalti, que firmó en los primeros treinta minutos desnudó la falta de efectividad de los lanzadores franceses.

Kirkelokke y Holm llegaron al descanso con sólo dos errores en el lanzamiento, pero los jugadores de primera línea del equipo francés contabilizaban un total de nueve, un problema al que añadir la escasa aportación de los guardametas Vincent Gerard y Wesley Pardin, que tan sólo lograron una parada en toda la primera mitad.

Dato, que sirvió, entre otros, para explicar los cinco goles de ventaja (17-12) con los que Dinamarca alcanzó el descanso, para regocijo de la selección islandesa, que necesitaba un tropiezo de Francia para acceder a las semifinales.

Una derrota de la que el conjunto francés pareció imposible que pudiera escapar tras unos primeros quince minutos de la segunda mitad en los que cada intento de reacción se veía abortado por un gol de Holm o de Kirkelokke, cuando no por una parada de Niklas Landin, que ocupó la portería danesa en el segundo tiempo.

Los nórdicos entraron en los últimos quince minutos con una ventaja de cinco goles (26-21) que pareció condenar definitivamente a Francia, que además se quedó en el tramo final sin su mejor defensor, el pivote Ludovic Fabregas, tras ver tres exclusiones.

Pero con todo perdido surgió la mejor versión del los "Experts", que, aferrados al carácter ganador de Luka Karabatic y los goles de Dika Mem, que tras anotar tan sólo uno de cinco lanzamientos en la primera mitad se disparó en la segunda a las ocho dianas, comenzaron poco a poco a acercarse en el marcador.

Mientras que el rendimiento de los jugadores franceses no dejaba de crecer, el de los daneses menguaba por momentos, confirmándose que ni Kirkelokke, pese a sus diez goles, es Mathias Gidsel, ni Holm, pese a su designación como mejor jugador del partido, es Mikkel Hansen.

En la selección francesa, un hasta entonces desaparecido Vincent Gerad comenzó a aportar con dos paradas que permitieron a los galos igualar la contienda (28-28) con un gol de penalti de Hugo Descat a poco más de tres minutos para el final.

Un tiempo en el que ni el ataque con siete hombres que propuso Dinamarca, carente hoy de la maestría de Mikkel Hansen, pudo impedir la remontada de Francia, que con un gol de Mem dio, por fin, la vuelta al tanteador (29-30) a un minuto y medio para el final.

Renta que Dinamarca con dos fallos consecutivos de Holm, que vio bloqueado su lanzamiento, y de Kirkelokke, que envió a la banda un pase al extremo, ya no pudo enjugar, haciendo posible un triunfo francés (29-30) que quince minutos antes nadie hubiera podido imaginar.