Fue una final de momentos puntuales que empezó con gran estado de forma de Vero Virseda y Bárbara Las Heras, un rendimiento que han mantenido durante todas las eliminatorias- y que le llevó a ganar por 4-6 el primer set ante las número dos, a las que le rompieron un saque y pusieron una ventaja que las invitó a soñar.
Ariana Sánchez y Paula Josemaría metieron otra marcha en la segunda manga, desde la gran defensa y con unos golpes más agresivos fueron a por la remontada hasta que, con 3-3, lograron rotura de saque y volaron hasta el 6-3 que lo dejó todo para el último capítulo.
Un gran comienzo de Sánchez y Josemaría, con un 2-0 que alertó a las rivales, fue enseguida contrarrestado por la intensidad de la pareja más en forma de este Abierto de Marbella, capaces de no despegarse de sus opciones de ser campeonas (2-2).
Un punto de oro con 2-3 para el lado de las favoritas fue el momento culmen para Las Heras y Virseda, que lograron igualar el partido y evitar dar un paso atrás por el título en un duelo lleno de puntos con más de 20 golpes y salidas de pista.
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Sin embargo, llegó el esprint definitivo de la extremeña y la catalana, que ganaron los tres siguientes juegos para cerrar la remontada con un 6-3 tras dos horas y media de partido durísimo en lo físico, a pleno sol en la pista central marbellí.
Paula Josemaría reconoció tras el partido que sus rivales las hicieron sufrir “muchísimo”, en un triunfo que lleva tres años consecutivos repitiendo en Marbella: “Aún no me lo creo”, destacó.
Su pareja deportiva, Ari Sánchez, quiso “felicitar a Bárbara y Vero porque han jugado un torneo increíble. En el deporte un día estas arriba y otro abajo".
"Jugamos cuatro finales este año y luego me lesioné, pero hoy hemos podido ganar y hay que valorar lo que estamos haciendo”, subrayó.