Tras la decisión del pasado mes de junio de convertir al campeón ucraniano en el vigésimo equipo de la Bundesliga 2, los rectores de la Liga germana han querido tener un nuevo gesto de apoyo al equipo ucraniano y el Motor Zaporozhye será el encargado de abrir la competición el próximo 31 de agosto ante el Bayer Dormagen.
Un encuentro que la Bundesliga quiere que sea un nuevo ejemplo de solidaridad con el pueblo ucraniano por lo que no ha dudado en programarlo en los prolegómenos de a final de la Supercopa de Alemania que enfrentará en Düsseldorf al Magdeburgo, el vigente campeón de Liga, con el Kiel, último campeón de Copa.
El mejor escenario posible para que el Motor Zaporozhye sienta desde su primer partido en la Bundesliga 2 todo el apoyo de los aficionados alemanes.
"Estoy convencido de que nuestros jugadores y nuestros grandes aficionados, pero también otras personas que no están conectadas con el balonmano, acompañarán a este equipo ucraniano en su emotivo viaje por Alemania", señaló el presidente de la Liga Alemana de Balonmano (HBL), Uwe Schwenker, en declaraciones a la página web de la Bundesliga.
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"Cada partido en casa y fuera de casa es una oportunidad para mostrar nuestra hospitalidad y al mismo tiempo hacer un gesto por la paz. Hagamos que los jugadores, sus esposas e hijos sientan que estamos con ellos. Se merecen y necesitan todo nuestro apoyo”, añadió el presidente de la Bundesliga.
Una idea con la que coincidió el responsable de deportes de la ciudad de Düsseldorf, Burkhard Hintzsche, la ciudad donde el Motor Zaporozhye disputará sus encuentros como local.
"El Motor Zaporozhye es un proyecto de corazón para nosotros y una señal positiva para todos los refugiados ucranianos en Düsseldorf. Nuestra ciudad con su público apasionado por el balonmano acogerá con euforia a este equipo y les hará sentir en casa en cada partido que jueguen como locales", indico Hintzsche.
Y es que el conjunto ucraniano, como recalcó el entrenador Dimitriy Karpushchenko, ha encontrado en Alemania, que ha acogido desde el inicio del conflicto bélico a más de 600.000 refugiados ucranianos, y en Düsseldorf un nuevo hogar.
"Nos han recibido con los brazos abiertos en Düsseldorf y estamos muy agradecidos de poder seguir jugando a pesar de la terrible guerra que está ocurriendo en nuestro país. Nos esperan muchos y emocionantes partidos Bundesliga 2", concluyó el preparador del Motor Zaporozhye.