Pogacar saldrá al frente de un equipo que buscará ampliar su palmarés de 18 victorias esta temporada, y el campeón del mundo luchará con garantías por el éxito en la prueba de 289 km, la carrera más larga del calendario profesional de ciclismo en carretera.
"Volví a la bici el lunes después de la Strade Bianche y tuve un par de días más tranquilos. Naturalmente, estaba un poco agarrotado y dolorido, pero por suerte ya me siento bien de nuevo", afirma Pogacar.
A pesar del accidente, el esloveno solo piensa en poner su nombre en el palmarés de la "classicissima".
"Estamos entrando en una etapa muy emocionante de carreras y me siento listo para la Milán-San Remo. Ya conozco muy bien el final del recorrido y esperamos brillar en la carrera el sábado. ¿Podemos ganar? Seguro que no será fácil, pero lo intentaremos con todas nuestras fuerzas", señaló.
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El UAE formará el sábado con Pogacar, Isaac Del Toro, Jhonatan Narváez, Domen Novak, Nils Politt, Vegard Laengen y Tim Wellens.